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Asexualidad en la era de la hipersexualidad: puntualizaciones acerca del espectro

La asexualidad es la A de la sigla LGBTTTQINBA+. Es una orientación/identidad sexual disidente. En otros sectores alonormados se la patologiza y medicaliza. Lejos de ser una enfermedad o un trastorno del deseo sexual, alrededor del 3% y el 5% de la población mundial actual se consideraría asexual. Por Lic. Noelia Benedetto MP 8136. Psicóloga […]

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La asexualidad es la A de la sigla LGBTTTQINBA+. Es una orientación/identidad sexual disidente. En otros sectores alonormados se la patologiza y medicaliza. Lejos de ser una enfermedad o un trastorno del deseo sexual, alrededor del 3% y el 5% de la población mundial actual se consideraría asexual.

Alrededor del 3% y el 5% de la población mundial actual se consideraría asexual. Foto: Telemundo.

Por Lic. Noelia Benedetto MP 8136. Psicóloga y sexóloga con perspectiva de género. Terapeuta de vínculos sexo afectivos.

Sesgos y desconocimientos

Es un error frecuente utilizar los términos asexual y asexuado/a como equivalentes, quizás sería más operativo el término anerótica/o. Lo cierto es que todas las personas somos sexuadas por hecho y por derecho, esto se relaciona con la Sexistencia; según Peirano, no hay existencia considerada humana que no esté dotada de sexualidad; pero algunas refieren que su orientación sexual, es decir hacia quiénes se acercan en aspectos sexuales pertenece al espectro asexual. Otras líneas la presentan como una identidad sexual.

Se considera, incorrectamente, que una persona es solo asexual si nunca siente atracción sexual o no mantiene encuentros sexuales, esto es una lectura muy lineal, ya que la asexualidad es un espectro. Hay personas asexuales que se autoestimulan, que tienen sexo pero en menor frecuencia, y personas que no tienen sexo pero sí relaciones románticas, ya sean hetero, homo, bi o pan. Tampoco tiene que ver con el género de la persona, puede ser trans, cis o no binaria.

Asexual: qué es, mitos y verdades sobre lo que significa la asexualidad |  ATMP | La República
Bandera de la asexualidad. Foto: La República.

Un/a asexual puede desarrollar su actividad sexual de distintas formas, puede optar por no tener sexo, aunque acceda a su práctica por diversos motivos, o puede abordarlo cuando quiera un objetivo reproductivo o porque quiera satisfacer a otra persona o también en situaciones de consentimiento viciado.

Desconocimientos cotidianos sobre la asexualidad incluyen equiparar la asexualidad al celibato, plantearlo como elección (es una orientación) o condición sexual o relacionarlo como consecuencia directa de un abuso sexual. 

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No es una orientación afectiva

Asexualidad no es sinónimo de arromanticismo, que alude a quienes no sienten atracción romántica/afectiva (los afectos son diversos, van más allá de lo romántico). Las personas asexuales pueden ser románticas o arrománticas en base a su necesidad de mantener relaciones afectivas o su oposición a las mismas.

El hecho de que una persona no sienta atracción sexual no quiere decir que no sienta otro tipo de atracciones, o que no le interese formar relaciones afectivas con otra persona. Las personas asexuales tienen las mismas necesidades afectivas que cualquier otra. La orientación afectiva de cada persona no tiene por qué coincidir con la sexual.

Asexual tampoco significa asocial, son personas que disfrutan del contacto con gente, pero no registran atracción sexual conforme a la alonorma.

¿Qué es la alonormatividad? 

Es la norma implícita en la sociedad que dice/impone que todas las personas deben sentir atracción sexual hacia otras, con determinada frecuencia e intensidad y querer tener sexo con cierta regularidad. Es decir, que una persona alosexual es aquella que registra/siente atracción sexual con la frecuencia e intensidad considerada “normal”, ¿para quién/es?, ¿quién/es construyen su sexualidad de manera lineal?

¿Qué es la asexualidad?

La clave está en la atracción sexual: el no experimentarla, experimentarla con baja frecuencia o intensidad, o en determinadas circunstancias; es el factor que se tiene en cuenta cuando una persona se define con alguna Identidad/Orientación Asexual. Acorde a cómo lo valore la propia persona esto puede ser considerado como orientación, falta de orientación o identidad sexual.

La asexualidad tiene que ver con un espectro de orientación sexual contemplado en la sigla LGBTTTQINBA+ de las identidades y orientaciones sexogenéricas diversas. Hay un conflicto dentro del propio colectivo LGBT+, ya que existe una lucha por la aceptación entre sus miembros/as, pues algunos creen que los/as asexuales no ven violados sus derechos y que, por tanto, habría que mantener separados los movimientos. 

El origen de la asexualidad como movimiento es reciente y se ha vinculado a los soshokukei danshi (chicos herbívoros), una tribu urbana que apareció en Japón hace menos de una década y cuyos miembros declaran su desinterés por el sexo y por el trabajo.

Según un estudio de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), alrededor del 3% y el 5% de la población mundial actual se consideraría asexual; es decir, unos 300 millones de personas.

Patologización y medicalización

El movimiento asexual apunta a demandar que los conceptos de salud sexual y mental que se emplean para hablar de asexualidad se distancien de los que normativiza el modelo médico hegemónico, ya que se tiende a la patologización y medicalización de estas orientaciones. 

Jeffrey Weeks afirmaba que «el sexo ha sido enfatizado como un instinto» que expresa las necesidades fundamentales del cuerpo, persistiendo en la idea de que la biología está siempre en la raíz de la sexualidad. En estas investigaciones se refuerza la presunción de que la falta de atracción sexual es un problema, ya sea psicológico, hormonal o fisiológico. Se insiste también en tratar y curar esa ausencia de atracción. Hay quienes fueron medicadas durante años para despertar la atracción (que a veces se confunde con deseo). Es habitual que a las personas asexuales se les diagnostique depresión, algún tipo de padecimiento mental o trastornos de la personalidad, o disfunciones/dificultades sexuales como trastorno de deseo sexual hipoactivo, disritmia o discronaxia sexual (según DSM o CIE). Los tratamientos no son efectivos porque no hay patología que tratar. 

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No confundir deseo con atracción

El deseo sexual no tiene por qué ir necesariamente vinculado a la atracción sexual, ni tampoco a la excitación. El deseo también es una emoción. Y no sentir atracción por alguien, no sentir deseo o no sentir excitación, no tiene por qué ser algo ni negativo ni patológico. Lo realmente patológico es decirle a la gente lo que le tiene que gustar, cómo y cuándo, y obligarse a sentir satisfacción de esa manera” aporta González Veiga.

La dificultad estriba aún en concienciar sobre la idea de que no tener interés por el sexo no implica enfermedad. La sexóloga Meloni explica que “Si el/la profesional que recibe no tiene información, puede llegar a patologizar, tratar, medicar y como poco, hablar de discrepancia de deseo, siempre pensando que quien manifiesta mayor atracción sexual por su pareja, parece ser ‘el par sano’ al que debiera aspirar ‘el par problemático’”.

Martina González Veiga

Personajes asexuales

Kafka, Newton, Chopin, Isabel I de Inglaterra, Hitler y Kant han sido consideradas personas  asexuales. Dalí tenía relaciones románticas sin sexo con sus musas; aunque les permitía tenerlas con otros hombres. De cualquier manera no podemos asociar asexualidad a una persona, salvo que la misma enuncie que se autopercibe como tal. 

Morrisey, cantante de The Smiths, se declaró abiertamente asexual cuando dijo que no podía imaginar su cuerpo “respondiendo a un estímulo sexual”. 

En series, Todd, personaje de BoJack Horseman o Florence en Sex Education. 

Espectro asexual: tipos

Aunque el espectro asexual presenta multitud de subcategorías, a continuación se presentan algunos de los términos más comunes que se incluyen bajo el paraguas de la asexualidad siempre desde el punto de vista de la ORIENTACIÓN/ATRACCIÓN SEXUAL (no romántico, sensual, estético, etc.).

ASEXUAL

Quien no siente/experimenta atracción sexual hacia otras personas.

ABROSEXUAL

Quien tiene una orientación sexual fluctuante. 

AUTOSEXUAL

Personas que sienten atracción sexual y quieren tener sexo consigo mismas.

CUPIOSEXUAL

Quien desea mantener una relación sexual pero no muestra atracción sexual hacia nadie.

DEMISEXUAL

Quien muestra atracción sexual solo cuando se ha establecido un potente vínculo emocional o psicológico. Según los colectivos Aven y ACEs: «El término demisexual proviene de una identidad que no está en el espectro asexual y asexual». Sin embargo, este término no significa que los demisexuales tengan una sexualidad incompleta o a la mitad, ni tampoco significa que la atracción sexual sin conexión emocional sea requerida para una completa sexualidad. En general, las personas demisexuales no se sienten sexualmente atraídas por un género u otro.

Sin embargo, una persona asexual se puede conectar emocionalmente a alguien más mientras que el demisexual se conecta emocionalmente a alguien solo si los sentimientos son de amor o amistad profunda, experimenta una atracción sexual y un deseo, pero únicamente hacia su pareja/vínculo.

EGOSEXUAL/AUTOCORISEXUAL

Ruptura del vínculo entre la persona y el objetivo sexual/motivo de excitación; alguien que puede tener fantasías sexuales o excitación en respuesta al arte erótico o pornografía pero carece de interés en participar en las actividades sexuales que incluyen. 

FRAISEXUAL

Atracción sexual por alguien que apenas conocés, hasta que empezás a conocer más y perdés por completo el interés.

GRISEXUAL

Quien siente atracción sexual únicamente de manera excepcional y/o ocasional.

LITOSEXUAL LITHSEXUAL

Quien manifiesta atracción sexual pero no desea que sea recíproca.

RECIPROSEXUAL

Atracción sexual sólo después de darte cuenta de que le atraés sexualmente a alguien.

Además hay personas sexo-repelidas, a las que no les interesa tener sexo. O sexo-indiferentes: les da igual. Sexo-favorables: no les molestaría tenerlo en caso de estar en pareja o por el motivo que fuera.

Foto: La100 Radio

Para finalizar

Una mayor representación es un elemento clave para permitirles a las personas reconocer y entender la asexualidad, así como normalizar, autodespatologizar y despatologizar esta orientación en esta sociedad hipersexualizada.

Debido a que escribo desde un lugar de mujer alo/endo/cis sexual les dejo estas recomendaciones para consultar información desde primeras fuentes: 

AVEN Red de Visibilidad y Educación Asexual (IG: @aven.pt).AgruPAs Agrupación de Pluralidades Asexuales (IG: @agrup.as).

Cristian Dominguez

Redactor y co-productor de contenidos para el sitio web y las demás plataformas de El Resaltador.
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