League of Legends: un amor-odio interminable

¿Cómo reconocer y superar una relación tóxica con League of Legends? Porque yo todavía no puedo.   

Por Irene Molina

Hay cosas que son inevitables y este día iba a llegar. Ya hace casi un año que empecé con esta columna y esperaba no tener que sacar a la luz que también soy una jugadora frecuente de League of Legends (LoL) desde hace ya 13 años. No es que me avergüence pero tampoco me enorgullece. Sobre todo porque después de tantos años ni siquiera juego tan bien. 

Después de pensarlo un poco, no me pareció mal momento para dedicarle unas palabras a uno de mis primeros juegos cooperativos online y mi primer encuentro cercano con la frustración verdadera. Aunque sea por la historia, por la anécdota. 

El primer paso es aceptarlo. Quienes jugamos League of Legends vivimos en una relación tóxica. Al principio es un gran descubrimiento, lo empezamos a entender, conocemos su lore, sus personajes, es un año más o menos de diversión plena. 

Para cuando ya conocemos casi toda su jugabilidad, y podemos usar un abanico de personajes sin dar vergüenza, empieza la debacle. Empiezan los desencuentros con nuestro equipo, los randoms que se desconectan, los que trollean, quienes juegan teemo, etc. 

Para ese entonces el jueguito ya saca lo peor de nosotros convirtiéndonos en personas que no queremos ser. Nos vamos a dormir enojados y tensos. Desinstalamos el juego por cuatro o seis meses. Tenemos una recaída, volvemos a instalar. Un bucle que repetimos durante varios años hasta que nos damos cuenta que tenemos +30 y todavía tenemos el ícono del LoL en el escritorio. 

Para quienes no lo conozcan, o si pero tuvieron recomendaciones contundentes de que no lo empiecen a jugar, League of Legends (LoL) es un videojuego multijugador de arena de batalla en línea desarrollado y publicado por Riot Games en 2009. Sus fundadores se inspiraron en Defense of the Ancients, un mapa personalizado para Warcraft III y a partir de eso buscaron desarrollar un juego del mismo género. 

Luego de su lanzamiento se convirtió en un éxito inmediato con jugadores de todo el mundo. A medida que la comunidad de jugadores de LoL creció, Riot Games continuó expandiendo y mejorando el juego, agregando nuevos campeones, modos de juego y características.

Desde entonces, ha sido uno de los juegos más populares en todo el mundo, con una comunidad de jugadores activos de más de 100 millones de usuarios mensuales y ha dado lugar a una gran base de jugadores y creadores de contenido.  

En 2011, Riot Games lanzó el Campeonato Mundial de LoL, el primer evento importante de deportes electrónicos en la historia del juego. A partir de ahí, se ha convertido en uno de los eventos deportivos más importantes del mundo y destacados dentro de los Esports.

El juego se desarrolla en un mapa de tres carriles y la jungla, donde dos equipos de cinco jugadores compiten por destruir la base enemiga que se denomina Nexo. Los jugadores controlan a los personajes, llamados campeones, que tienen habilidades únicas y diferentes roles en el juego, como asesinos, magos, tanques y tiradores. 

Durante la primera fase del juego, los jugadores matan a monstruos neutrales para obtener oro y experiencia para adquirir ítems, mejorarlos y subir de nivel. A la vez que se destruyen torres enemigas para avanzar en el mapa. En el juego tardío, el combate comienza cuando los equipos luchan entre ellos con el objetivo final de destruir el Nexo enemigo.

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Uno de los mayores atractivos de LoL es su amplia variedad de campeones jugables. Hay más de 150 campeones en el juego, cada uno con habilidades y estilos de juego únicos que se pueden combinar estratégicamente para armar diferentes composiciones de equipo según la línea del mapa que cada jugador elija.

Otra característica importante es su sistema de ranking competitivo. Los jugadores pueden jugar partidas clasificatorias para competir por puntos y subir en la tabla de clasificación. Al final de cada temporada, los jugadores reciben recompensas basadas en cada resultado.

Además del modo de juego clásico, también cuenta con modos de juego alternativos como ARAM (All Random All Mid) y URF (Ultra Rapid Fire), que proporcionan otras experiencias de juego más casuales y divertidas.

RIOT también a expandido la franquicia a otros géneros con VALORANT (Shooter primera persona), TEAMFIGHT TACTICS (estrategia, auto battler), LEGENDS OF RUNETERRA (cartas coleccionables), LOL: WILD RIFT (versión modificada del juego de PC para sistemas operativos Android, iOS, y próximamente disponible en consolas).

Vale aclarar también que es gratuito y se financia por compras dentro del juego en lugar de cuotas mensuales (aspectos de campeones, chromas, objetos de juego, etc.).

En definitiva, a pesar de las quejas, con constancia a lo largo de estos años aprendí a sobrellevar el malestar y la frustración para ser una mejor jugadora, y no hablo de habilidad, si no de liderazgo. 

Como siempre todo va ligado a un tipo de aprendizaje. En el LoL la función de un buen líder siempre lleva a una victoria asegurada o al menos estar cerca. Y cuando las interacciones en el juego a menudo implican comportamientos destructivos y comentarios despectivos sobre el rendimiento de un jugador, es lógico que se vuelva poco saludable e incite a las personas a dejar de jugar.

Es importante como en cualquier ámbito y en cualquier juego establecer límites saludables y protegernos de situaciones dañinas buscando compañeros de equipo positivos y siendo una persona jugadora que aporte a una comunidad más positiva y contenedora.   p

Me doy el gusto de seguir jugando League of Legend porque su universo es inmenso y atractivo, está lleno de historias y personajes que se conectan y me permite estar conectada con mi lado más competitivo, de cara a mejorar habilidades, y mi lado más humano, en pos de poder mejorar el manejo de la frustración. 

En esta nota: cultura, Irene Molina, videojuegos