Día Mundial de Protección de la Naturaleza: la conciencia ambiental se abre paso

En una nueva efeméride ambiental, revisamos el camino recorrido por el activismo en los últimos años. Con leyes pendientes, logros para celebrar y desafíos por encarar, la conciencia ambiental se abre paso.

Sobre el cuidado de nuestro planeta hay mucho para decir. Por esto, en el Día Mundial de Protección de la Naturaleza, repasamos los desafíos por cumplir, los logros a celebrar y las leyes que aún quedan por debatir: algunos de los puntos claves para re-pensar qué estamos haciendo por nuestro planeta.

Esta jornada internacional tiene su origen en una carta abierta elaborada por Juan Domingo Perón. En 1972 escribió: “ha llegado la hora en que todos los pueblos y gobiernos del mundo cobren conciencia de la marcha suicida que la humanidad ha emprendido a través de la contaminación del medio ambiente y la biosfera, la dilapidación de los recursos naturales, el crecimiento sin freno de la población y la sobreestimación de la tecnología. Es necesario revertir de inmediato la dirección de esa marcha, a través de una acción mancomunada internacional".

El Secretario General de las Naciones Unidas, el austríaco Kurt Waldheim, impresionado por aquel texto dispuso que a partir de entonces, el 18 de octubre sea declarado como Día Mundial de Protección de la Naturaleza.

Algunos datos alarmantes

En lo que va de 2021 se quemaron 153 mil hectáreas en la zona de Delta del Paraná. Es decir, el equivalente a siete veces la superficie total de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Esto se suma al millón de hectáreas de distintas regiones de nuestro país, afectadas directamente por incendios durante el 2020. En la misma línea, el Museo de Ciencias Naturales "P. Antonio Scasso", informó que este año también se registraron 10.230 focos de calor.

No sólo eso, sino que el Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF) informó que entre el 1º de enero y el 20 de febrero de 2021 los incendios afectaron un total estimado de 61.760 hectáreas en todo el país, afectando principalmente a la Patagonia. Para ampliar la información sobre lo sucedido durante este y el año pasado, la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN) difundió un informe al respecto.

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A propósito de la fecha, conversamos con Magdalena Gavier, integrante del Frente Antiespecista Interseccional Revolucionario (FAIR), para poner en común algunas cuestiones fundamentales.

¿Qué logros debemos tener en cuenta y celebrar en torno a esta fecha?

Magdalena comenta que "desde hace casi 50 años se conmemora en esta fecha el Día Mundial de Protección de la Naturaleza. El propósito de este día básicamente es concientizar sobre el daño que la humanidad ha generado históricamente a la naturaleza, el ambiente y a diversas especies para, en su lugar, promover acciones e iniciativas que colaboren (de manera colectiva e integral) en la reparación y en la búsqueda constante de la erradicación de aquellas acciones que generan daños".

"Esta fecha no es una celebración de un mundo feliz, sino un recordatorio para que actuemos en consecuencia de lo que aún el día de hoy seguimos perpetuando, directa o indirectamente: la degradación de nuestra tierra". Además, agrega que "al día de hoy, según datos estadísticos de la ONU, cada tres segundos, el mundo pierde una superficie de bosque equivalente a un campo de fútbol, y, tan sólo en el último siglo, hemos destruido la mitad de nuestros humedales".

"El 50% de nuestros arrecifes de coral ya se han perdido y para 2050, podrían desaparecer hasta el 90%, incluso si el calentamiento global se limita a un aumento de 1,5°C".

En el mismo sentido, "es importante entender que esta pérdida de ecosistemas está privando al mundo de sumideros de carbono (que son como depósitos naturales o artificiales que absorben y capturan CO2 de la atmósfera) en un momento crítico en el que, si no actuamos, probablemente entremos en un callejón sin salida. Las emisiones globales de gases de efecto invernadero vienen aumentando de manera gradual y consecutiva, y el planeta está a un paso de un cambio climático catastrófico".

A esto, Magdalena añade que "Flavia Broffoni explica esto muy bien en su libro "Extinción", cuando habla de que estamos frente a puntos de inflexión, de "no retorno". Desde su perspectiva, basada en evidencia científica, dice que tenemos que tomar acciones concretas ahora, no esperar más tiempo, porque una vez que superemos esos tres puntos, se van a desatar cambios irreversibles que será casi imposible frenar. Y, esos cambios, al igual que los puntos de inflexión, están inter-conectados y por ende se van a ir retroalimentando en forma de cadena".

¿Qué desafíos encara el activismo respecto a la protección de la naturaleza actualmente?

Magdalena Gavier dice que "la fecha que hoy nos invita a pensar en "restaurar los ecosistemas", debe invitarnos a tomar acciones concretas para prevenir, detener y revertir el perjuicio que estamos causando a la naturaleza, dejar de dañarla y empezar a repararla. Y esta acción debe ser global, colectiva y transversal".

"En ese sentido, el activismo tiene un rol fundamental: habitar las calles, exigir información certera y honesta, ocupar físicamente los espacios de lucha, difundir información, y, especialmente, acompañar y ser empáticos en las luchas que busquen reivindicar los derechos de los sectores sociales y las especies desprotegidas o violentadas: ser interseccionales en las luchas, que implica necesariamente tener una visión ecologista y solidaria".

"Restaurar los ecosistemas no sólo es dejar de dañar la tierra y tratar de sanarla, sino también restaurar nuestros vínculos como personas (humanas y no humanas), salirnos de la visión capitalista y antropocentrista para entender que no somos la única especie que habita el planeta (aunque sí la única que lo está destruyendo) y buscar una salida que sea realmente colectiva y nos beneficie a todos".

Al respecto, Flavia Broffoni en su libro menciona "desde los espacios de resistencia que habitamos los activismos debemos comprender la intersección de luchas y acompañarnos de forma mutua para dar una disputa de sentidos que sea honesta. No sólo contra el monstruo de tres cabezas -colonialismo, patriarcado y capitalismo- sino que nos ayude a redefinir la propia historia dinámica de los vínculos comunitarios".

¿Cómo proteger a la naturaleza en nuestra cotidianeidad, para no caer en los "no puedo"?

Magdalena enfatiza en que "para dejar de ser parte del problema, y ser un poquito más parte de la solución,
podemos hacer algunas cosas simples (son más actitudinales):

• Mantener una postura crítica y reflexiva siempre.
• Tomar acciones como ciudadanos que nos corresponden por derecho (como exigir información certera y veraz, protestar cuando no estamos de acuerdo con alguna acción u omisión de acción, proponer cambios concretos, convocar y/o asistir a audiencias públicas, entre otras formas de participación ciudadana).
• Exigir a quienes están en el poder por voto popular que desarrollen políticas públicas estratégicas reales para restaurar los ecosistemas de manera transversal, no sólo en entornos urbanos sino en la totalidad del territorio (especialmente en zonas afectadas por el uso de agrotóxicos, la deforestación, etc.).
• Hay muchísimas acciones concretas para cuidar el planeta que ya muchos conocen (como andar en bici en vez de andar en auto, reducir el consumo de plásticos, reciclar, cuidar el agua, entre otras)".

"Pero la verdad es que estamos en un momento bastante crítico en el que esas pequeñas acciones solitas no alcanzan. Por eso, voy a rescatar 3 acciones concretas que son un poco más a largo plazo y generan cambios más rotundos:

• Plantar árboles nativos y promover la reforestación con plantas autóctonas.
• Activar de manera colectiva: sumarte a algún especio de activismo donde puedas trabajar con otras personas, ampliar tu perspectiva de las problemáticas sociales y ambientales, etc.
• No consumir animales ni sus derivados (para desalentar la producción desenfrenada de granjas industriales y territorio destinado a la ganadería, y por ende desalentar la producción de granos repletos de agrotóxicos para el engorde de animales)".

En esta nota: Ambiente, Naturaleza