Senegal: ¿la nueva pesadilla de Francia?

En cuestión de horas, Bassirou Diomaye Faye pasó de estar preso a ser el nuevo y más joven presidente de Senegal . ¿Quién es? y ¿Por qué su victoria preocupa a Francia?

“El pueblo senegalés ha decidido romper con el pasado”, sentenció ante la prensa en su primera alocución como Presidente de Senegal luego de aplastar electoralmente al candidato oficialista y ahora ex primer ministro, el profrancés Amadou Ba.

Por difamación contra el gobierno, Faye estuvo preso los últimos once meses (junto a mil compañeros de militancia) pero salió una semana antes de las elecciones presidenciales en libertad gracias a una ley de amnistía y también a la presión de una gran parte del pueblo que hizo legitimar su candidatura para luego convirla en una apabullante victoria.

Tras doce años de gobierno, y tras verse imposibilitado para volver a presentarse, el ahora saliente presidente Macky Sall tuvo que reconocer la derrota incluso antes de dar a conocer los resultados oficiales.

Bassirou Diomaye Faye se convirtió días atrás en el presidente más joven de su país, con tan solo 44 años.

"Los tiempos han cambiano y es hora que Francia vuelva a su casa. Africa quiere escribir su propia historia", expresó Faye recientemente ante la prensa.

Cambio de época en Senegal

Faye pertenece al partido político panafricanista anti-francés "Patriotas Africanos de Senegal por el Trabajo, la Ética y la Fraternidad" (PASTEF), con el que ovtuvo el 56% de los votos en unas elecciones que debieron realizarse tras un fallo de la Suprema Corte de Justicia, ya que el oficialismo -que obtuvo un 31%-, pretendía estirar los comicios hasta fin de año por los resultados negativos que anticipaban.

El PASTEF estuvo proscripto hasta hace poco tiempo y todos sus líderes fueron encarcelados, al igual que muchos de sus militantes, quienes siempre fueron reprimidos en las manifestaciones callejeras.

¿Quien es Faye y por qué se ganó la popularidad de su pueblo?

Criado en una humilde familia de agricultores senegaleses, Faye realizó sin dificultad sus estudios primarios y secundarios para luego perseguir su gran meta académica: recibirse de abogado en la universidad. Una vez que obtuvo la licenciatura en derecho, junto a su gran colega y líder del PASTEF, Ousman Sonko (quien eligió a Faye como candidato tras estar prohibido de participar en las elecciones), se conviertieron en inspectores de finanzas del Estado senegalés, donde en 2005 deciden crear el sindicato de funcionarios públicos.

“Nadie puede decir que no tiene integridad. Yo diría incluso que tiene más integridad que yo. Pongo el proyecto en sus manos", Ousmane Sonko, líder opositor y cofundador de PASTEF.

En la década que va desde el 2005 hasta el 2015, el sindicato se gana la legitmidad de los funcionarios públicos y otros trabajadores no estatales que empiezan a ver en estos dos líderes sindicales y dignos trabajadores una potencia para cambiar décadas de desencanto con el orden pro-francés establecido.

Con logros alcanzados en términos de derechos laborales y fuertes críticas a la permanente corrupción de las élites, en un rincón del mismo Estado, nació una lenta pero segura esperanza de cambiarlo todo. En el año 2014, ambos fundan el PASTEF, el cuál una década más tarde obtendría su mayor logro, nada más y nada menos que la presidencia de la República.

Desde la fundacón del espacio nacionalista tradicional, las élites pro-francesas dominantes en Senegal desde 1960, vieron con preocupación el crecimiento sostenible de las fuerzas juveniles que consolidaban el único partido panafricanista del país. Vale remarcar, que el sistema político semipresidencialista de Senegal se mantuvo hasta el momento con duraderas presidencias (Léopold Sedar Senghor 1960-1980, Abdou Dioufb 1980- 2000, Abdoulaye Wade 2000-2012, Macky Sall 2012-2024). Faye viene a romper este ciclo vicioso donde Francia tuvo gran influencia.

En los últimos años, Sall (presidente saliente) reprimió todas las manifestaciones del PASTEF (incluyendo el asesinato de 60 jóvenes militantes) y cuando vió que ello no funcionaba, llamó a sus socios de la Justicia y los líderes del partido opositor fueron judicializados y encarcelados.

Ante cada compadecencia en los Tribunales, miles de jóvenes acompañaban a sus líderes. La situación de crisis y las masivas movilizaciones empujaron al STJ y a los diputados a aprobar una ley de perdón y otra para que se cumplan las elecciones en el tiempo que correspondía.

En libertad, Faye fue elegido masivamente y es quien tendrá en sus manos el destino de millones de senegaleses, en su mayoría jóvenes, ya que estos constituyen dos tercios de la población total de Senegal.

Francia a casa

El partido ganador se propone un cambio radical para el país, el cuál inlcuye la salida del franco CFA (moneda que Francia controla en 14 países africanos), la renegociación de contratos en minería, pescadería y agricultura, una reforma fiscal y agraria y la universalización de la coertura médica y educativa a toda la población.

Francia pierde lo que siempre entendió -reiteramos- como su colonia más antigua, la cuál se suma a la ola de gobiernos y líderes panafricanistas que en Burkina Faso, Malí, Níger y ahora Senegal, se imponen ante un amo que debe volver a casa sin chistar.

Siglos de dominación y violencia colonial parecen llegar a su fin, pues la historia grande de África vuelve a ser escrita por sus verdaderos habitantes, ahora también en la denominada África Occidental y no solo en el Sahel africano. Un ejemplo que debería saltar el charco e impulsar a los y las latinoamericanas a soñar por sus verdaderas y segundas independencias.

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