Este martes se confirmó una nueva coincidencia genética entre los restos recuperados en la Barranca de la Carnicería, en México.
Con la colaboración del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), médicos austríacos, lograron identificar al estudiante Jhosivani Guerrero de la Cruz, quien se suma a Christian Rodríguez Telumbre y Alexander Mora Venancio, víctimas de la masacre de Ayotzinapa.
«Podemos reportar con todas las instituciones del Estado mexicano involucradas en los hallazgos y traslados a la Universidad de Innsbruck, Austria, que la identificación es cierta de Jhosivani Guerrero de la Cruz«, dijo el fiscal especial Omar Gómez Trejo, en un mensaje leído en un video, difundido a la prensa internacional por la Fiscalía General de la República.
Desde el EAAF, comunicado de por medio, explicaron que el resto óseo fue recuperado en octubre de 2020 por la Unidad Especial de Investigación y Litigación para el Caso Ayotzinapa, a cargo de Gómez Trejo.
El informe recibido de Innsbruck (Austria) detalla sobre el perfil genético completo que: “los datos genéticos nucleares [provenientes de la muestra ósea] tienen al menos un billón de vecesde veces más probabilidades de ser (…) de un hijo biológico de la madre y del padre y de un hermano biológico completo (…) de las hermanas y el hermano de Jhosivani Guerrero de la Cruz en comparación con que los restos no identificados sean originados por un individuo no relacionado”.
¿Esto qué significa? Que la muestra analizada analizado tiene al menos mil millones de probabilidades más de pertenecer al estudiante desaparecido que a una persona no relacionada a esta familia.
El equipo de antropología analizó el dictamen y confirmó sus resultados. Por otra parte, realizó un dictamen de genética complementario, con cálculos estadísticos adicionales sobre probabilidad de parentesco y genética poblacional, que arroja un porcentaje de parentesco superior al 99,99%, teniendo en cuenta las variables estadísticas aplicables a este caso.
Mercedes Doretti, miembro fundadora y directora para Centro y Norte América del EAAF, dijo que “estos resultados son extremadamente dolorosos para los familiares del joven Jhosivani Guerrero de la Cruz. Le expusimos a la familia por qué estos resultados son concluyentes».
Y agregó: «El EAAF seguirá trabajando junto a las familias de los 43 estudiantes, sus representantes legales y la Unidad Especial para el Caso Ayotzinapa de la FGR para llegar a la verdad de lo ocurrido.”
Los hechos
La “desaparición forzada de Iguala de 2014” se enmarca en situaciones de violencia ocurridas entre 26 y 27 de septiembre, en México.
¿Qué sucedió? la policía municipal de Iguala y estatal de Guerrero, persiguió y atacó a estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, ubicada a más de 250 km de Iguala, a quienes acusaban de haber tomado de forma ilegal colectivos en la terminal local.
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La represión fue brutal. Civiles y periodistas fueron heridos por las fuerzas de seguridad. Se estima que al menos hubo 9 personas fallecidas, 27 heridos y 43 alumnos desaparecidos.
El caso estuvo estancado durante años, pero con el presidente Andrés Manuel López Obrador, y la Fiscalía a cargo de Gómez Trejo, se desechó la llamada «verdad histórica» de lo que sucedió, con la que se pretendió cerrar el caso y según la cual la desaparición fue obra exclusiva de narcotraficantes.
El actual mandatario de México confesó semanas atrás que «Ayotzinapa es una espina clavada en el alma» y defendió las nuevas investigaciones.
Por último, recordamos que desde octubre del 2014, el EAAF actúa como perito independiente a pedido de los familiares de los 43 estudiantes desaparecidos y las organizaciones que los acompañan.
Este trabajo lo realiza junto con el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez AC y el Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan que acompañan y representan legalmente a los familiares de los desaparecidos.