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UNC y Arquitectura: "lo fundamental es que el estudiantado demande el cambio"

Una docente renunció a su cargo y nos interpeló para pensar en el perfil de los y las profesionales que se forman en las aulas públicas. Emiliana Martina presentó una carta dando a conocer los motivos por los que dejó su cargo como profesora en la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño (FAUD) de la […]

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Una docente renunció a su cargo y nos interpeló para pensar en el perfil de los y las profesionales que se forman en las aulas públicas.

UNC y Arquitectura: "lo fundamental es que el estudiantado demande el cambio".

Emiliana Martina presentó una carta dando a conocer los motivos por los que dejó su cargo como profesora en la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño (FAUD) de la Universidad Nacional de Córdoba y, nuevamente, es necesario recordar el rol social que debería marcar el ritmo de la casa de estudios.

La primera razón de su renuncia está vinculada al perfil profesional que empuja a los y a las estudiantes hacia un modelo de arquitectura global, pensando solo en beneficios económicos y sin reflexión de la crisis ambiental que atraviesa la sociedad; y la segunda, es que la calidad curricular lleva al estudiantado a pensar en soluciones proyectuales descontextualizadas de la realidad actual.

Este formato de enseñanza impacta en el diseño de ciudades en cuanto a desigualdades, ambiente, emergencia habitacional, ciudades poco inclusivas, etc.

Para Martina, el modelo de ciudad del paradigma actual, al que denomina modelo urbano hegemónico, tiene como origen una dependencia funcional con una forma de administración de los recursos netamente extractivista: "La vida urbana se basa en un modelo de consumo lineal, infinito".

"Esta forma de habitar, por cierto materialista, impacta en el territorio de diversas maneras: destruyendo los bienes comunes naturales —en su mayoría elementos no renovables—, contaminando en ese camino lo que hay a su paso, y violentando la diversidad de las formas de vida, que recae con su mayor peso sobre grupos poblacionales históricamente desplazados, marginados, segregados y expulsados", enfatizó la entrevistada.

Te puede: "UNC, divino tesoro: la educación no es una mercancía, es un derecho"

La profesional critica esa matriz de pensamiento que persiste en la academia, que obstaculiza tomar conciencia para generar transformaciones en lo curricular y el modo de enseñarlo. Considera que "la mirada de la universidad ha perdido el rol crítico que debería caracterizarle por ser el lugar donde se construye el conocimiento que luego se 'pondría' al alcance de la sociedad".

En relación al punto anterior, sostiene que hay dos problemas: por un lado que no se pone al alcance de una sociedad plural, sino de un sector que puede monetariamente adquirir el servicio de las personas profesionales. Y por otro, que la herramienta profesional se logra mediante el dinero aportado por esa misma sociedad.

"El sesgo del pensamiento meritocrático ha consolidado un espíritu individualista y competitivo que conlleva a conseguir una supuesta calidad de vida unipersonal, sin importar siquiera cual es el conocimiento construido", plantea Martina.

Si la educación es un negocio, si la formación de profesionales responde mayoritariamente a lógicas capitalistas, su función de transformar la sociedad queda relegado.

"Lo fundamental es que el estudiantado demande el cambio. La educación es un derecho y brindar una buena educación debería ser la obligación. Poner en alza los dolores que habitan en sus voces es la manera de construir las libertades que les faltan", profundizó.

Mención aparte se merecen las y los docentes que desde sus espacios fomentan otras maneras de pensar, que muestran que otras realidades son posibles, que el conocimiento al servicio del pueblo es el horizonte que debería guiar a quienes caminan por Ciudad Universitaria.

La UNC es pública y, a pesar de estas contradicciones que se mantienen en sus aulas, todavía faltan políticas educativas que garanticen de manera efectiva la inclusión integral de sectores populares. Es la lucha social y estudiantil la que motoriza ese cambio.

Emilia Urouro

Encargada de la redacción de las notas y de generar contenido para las diferentes plataformas del Resaltador. Feminista, popular y nacional.
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