El torneo “Mariana Ferretti” arrancó el pasado 29 de abril en la ciudad de Río Cuarto, primero y único de la provincia en el que participan las categorías femeninas sub 7, sub 9, sub 11, sub 14 y sub 16. Un precedente que marca un antes y un después en la provincia y el país.
“Cuando tenía 9 años jugué al fútbol unos meses con el equipo masculino del Club Sportivo y Cultural Herlitzka. Me vestí con la remera azul y blanca, la del club de mi pueblo, de mi vida. La camiseta del club con el que aprendí de pasión. Era la única niña del equipo. Lo máximo que jugué fue un encuentro amistoso de infantiles en la cancha de Atlético Sampacho y lo que más recuerdo fue que me erré un penal. (…) Después, jugué en el “Mauro Herlitzka” y en el “Monumental”, imaginados en el patio de mi casa. Todo fue imaginado desde el día en que no pude jugar más con los chicos, porque ingresaban a competir formalmente a la Liga Regional y ahí yo no podía estar. (…) Hoy, 29 de abril de 2023, vi a una niña de 9 años hacer un gol, festejarlo con sus compañeras y largarse a llorar. Todo lo hizo siendo jugadora, en su equipo de fútbol femenino, en el primer Torneo Infanto Juvenil Femenino de la Liga Regional de Río Cuarto” escribió Delfina Vettore, comunicadora y delegada del fútbol femenino en la Asociación Atlética Banda Norte de Río Cuarto, en Escuchalas Gambetear.
El sábado 29 de abril marcó un antes y un después en el fútbol femeino del país. Río Cuarto ya forma parte del libro grande del deporte nacional al ser el escenario del primer Torneo Infanto-Juvenil Femenino “Mariana Ferretti”. Un precedente histórico, no sólo para la Liga Regional de Fútbol de Río Cuarto, sino para toda la provincia de Córdoba, que extiende su compromiso, vínculo y título de pionera en materia de fútbol femenino.
Un hecho que nuevamente da cuenta al fútbol femenino como esa reparación histórica que la sociedad le debía a las mujeres, y en este caso, a las infancias. Una nueva puerta abierta que otorga oportunidades a las nuevas generaciones, a aquellas nenas que ya entienden al fútbol como una cuestión sin género, tal cual como lo es.
Formato del torneo
Las categorías participantes del torneo son las Sub 7, Sub 9, Sub 11, Sub 14 y Sub 16. Aunque ya en el 2022 hubo una prueba piloto para las jugadoras más chicas, en las que participaron la Sub 14 y Sub 16. Dicha prueba constituyó un termómetro y base de lo que actualmente es la competencia que incluye a 17 clubes de la región.
Clubes participantes
Atenas, Renato Cesarini, Rosario Fútbol Club, Santa Paula (Carnerillo), Toro Club (Coronel Moldes), Universidad Nacional de Río Cuarto, Ateneo Vecinos (General Cabrera), Acción Juvenil (General Deheza), Sportivo Municipal, Estudiantes de Río Cuarto, Los Incas (Achiras), Banda Norte, Argentinos Juniors de Las Delicias, Centro Social Las Higueras, El Ciclón (San Basilio), Atlético Granada (Holmberg) y Everton Club (Coronel Moldes).
Las categorías infantiles Sub 7, Sub 9, Sub 11, disputan el torneo en la cancha chica, y lo hacen de forma recreativa en un proyecto que promueve la inclusión y formación futbolística de las niñas, y de momento, no juegan por los puntos. Mientras que las juveniles de la Sub 14 y Sub 16, lo hacen en la cancha grande y de forma competitiva con acumulación de puntos. Las sedes van variando según las fechas y las localías de los respectivos clubes. Los partidos se juegan cada 15 días.
El homenaje en vida para una pionera que dedica la suya al deporte: ¿Quién es Mariana Ferretti?
A 230 kilómetros de la ciudad de Córdoba, al este del departamento de Río Cuarto, está Chucul, una pequeña localidad agraria y ganadera de no más de 400 habitantes. De allí es Mariana Ferretti, el nombre del primer torneo infanto-juvenil de fútbol femenino de la provincia.
Junto con Dianela Aguirre, durante el año 2014 Ferretti presentó un proyecto para instaurar el fútbol femenino en la Liga de Río Cuarto. Ese año, arrancaron con 6 equipos, hasta llegar, durante el paso de los años, a 21 equipos, siendo la cifra máxima de equipos femeninos en la liga hasta el momento.
Mariana Ferretti, aparte de ser profesora de educación física, entrenadora y jugadora de hockey, acumula un recorrido con el fútbol femenino: artífice de impulsar la disciplina en Río Cuarto. Su vínculo con el deporte rey es desde que nació, pero a los 12 años, mientras jugaba con sus amigas en un torneo en Charras, una localidad cercana a Chucul, fue vista para integrar la Selección Femenina de Río Cuarto.
A comienzos del 2003 tuvo una prueba en Boca Juniors, club del cual es hincha, y a los 6 meses de la prueba le comunicaron que quedó. Jugó en el equipo Xeneize seis meses más, pero su sueño se pausó ya que le resultaba muy complicado viajar frecuentemente a la Capital Federal, por lo económico y por sus compromisos profesionales en Córdoba. No obstante, en Río Cuarto siguió jugando al fútbol en torneo relámpagos organizado por las propias chicas que lo disputaban.
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En el año 2005, la Selección Femenina de Argentina, ya dirigida técnicamente por el vitalicio Carlos Borrello, llegó a Río Cuarto para hacer visorias y disputar un amistoso contra un equipo integrado por jugadoras de la región. Al año siguiente, Borrello llamó a Ferretti para integrar el seleccionado que ya entrenaba en Ezeiza, y viajó a España junto al equipo.
Tras sufrir un ACV durante el 2007 mientras jugaba al hockey, dejó la actividad física y atravesó cuatro años de rehabilitación. Luego, ya en el 2009, empezó a entrenar jugadoras de fútbol 11 de la Universidad de Río Cuarto que entrenaban durante todo el año para competir 7 días en torneos en Buenos Aires. Tras esa experiencia, surgió la idea de presentar un proyecto en Río Cuarto para una liga de fútbol femenino.
“Volví a ser chiquita y a jugar” cuenta Mariana Ferretti entre lágrimas y con la voz quebrada, al referirse al actual torneo infanto-juvenil que lleva su nombre. “Este torneo es una realidad que tenemos que disfrutar sanamente, dejar que las niñas jueguen, disfruten, se diviertan y que aprendan. Para que en el futuro sean parte de una primera división en el club que las protege”. Ferretti también hace alusión a la construcción de identidad y sentimiento de pertenencia de las niñas con los clubes que hoy representan, de que sientan en la camiseta ese amor y orgullo de ser parte.
“Este gran reconocimiento es un sueño cumplido, no sólo para mí, sino para todas las personas que hemos sido parte de esto, cada cual en su lugar y con su función. Esto generó que las niñas tengan al fútbol como una opción, y que dejemos de lado los tabúes porque el fútbol también es de las mujeres”.
«Son muchas sensaciones. Desde el 2019 volví a jugar fútbol después de haberme dedicado más al hockey, porque cuando era chica y comencé en mi pueblo no tuve la posibilidad de jugar al fútbol. Y desde lo periodístico, también en el 2019 empecé a cubrir fútbol femenino» relata Delfina Vettore, también periodista de Al Toque Deportes, para El Resaltador.
«Me emociona mucho desde el lado de haber sido una niña que quiso jugar al fútbol cuando tenía 8 o 9 años, y jugó un torneito mixto, pero después no pudo continuar porque justamente no había esta posibilidad. Hoy ver a niñas de esa edad jugando y teniendo esa posibilidad de elegir el deporte que les gusta, y si les gusta el fútbol que puedan jugarlo, es una emoción muy grande».
Vettore se expresó al respecto de todo lo que genera este precedente en Río Cuarto, y de esa compensación histórica que hoy las más chicas ya están disfrutando.
«Emociona ver un torneo infanto-juvenil con un montón de nenas en la cancha, con muchas categorías, con todo el proceso que hay detrás, con todo lo que falta también por crecer y por hacer para ellas para el futuro. Me emociona… Mi equipo, las lobitas, las inferiores de banda norte, porque somos algunas jugadoras también que estamos muy involucradas en el proyecto en el club» añade.
Delfina, aparte de su rol de delegada en la Asociación Atlética Banda Norte, también forma parte del equipo de Escuchalas Gambetear, junto a Pía González Righetto, un espacio periodístico riocuartense, en el que realizan coberturas, entrevistas y difusión en general del fútbol femenino de la región y el país.
El Torneo Infanto-juvenil femenino «Mariana Ferretti» salda la deuda a las infancias de generaciones pasadas que se quedaron atrás del alambrado cuando querían estar pisando el césped. Un acto de justicia tardía que gambetea cualquier vestigio de discriminación en el fútbol. Porque es fútbol o discriminación, ambas palabras son un oximoron: es una o la otra. Y hoy ganó la otra, el fútbol. Aunque en realidad hoy ganaron ellas, las más chicas. Una victoria que también hacemos y sentimos propia quienes vinimos a este mundo amando al fútbol y su caos.
«Hoy, en este absurdo total que a veces es la vida, la muerte, el amor, el dolor, la economía explotada, y tantas cosas más… hoy, en este absurdo total, el mundo fue un lugar mejor. El mundo fue un abrazo de gol» culmina Delfina Vettore en su emotivo posteo de Escuchalas Gambetear.