¿Quién es Daniel Salamone, el futuro titular del CONICET?

El famoso "clonador" estará frente al organismo de ciencia y técnica desde el 10 de diciembre. El investigador planea integrar el sistema científico con el sector privado y reducir los ingresos de los trabajadores.

El presidente electo, Javier Milei, propuso a Daniel Salamone para conducir el CONICET, nuestro prestigioso organismo de ciencia y técnica.

Desde su laboratorio de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires (UBA), Salamone plantea la necesidad de integrar el sistema científico con el sector privado; traducir el trabajo del laboratorio a resultados concretos, incorporar el financiamiento de fondos de inversión, empresas y universidades; promover la creación de start ups; fomentar la integración de equipos internacionales y proporcionar soluciones a las necesidades de la población "en un país que, en este momento, es pobre".

Por esta razón, este personaje controversial -conocido por haber sido consultado por Milei para clonar a Conan, su perro fallecido- insiste en una reforma del sistema de producción científica desde el CONICET.

Te puede interesar: "¿Cuál sería el impacto de privatizar los medios públicos?"

"Contar con el organismo gubernamental de ciencia más prestigioso de América Latina no quiere decir que hayamos hecho todo bien, porque, sino, tendríamos un índice de innovación muchísimo mayor y hay cosas de las que directamente nos hemos olvidado", afirmó.

¿Quién es el "clonador"?

Daniel Salamone nació en la provincia de Entre Ríos y actualmente tiene 63 años. Se graduó en la Universidad de Buenos Aires (UBA) como médico veterinario. Posteriormente, realizó cursos de posgrado y maestrías en Japón, Canadá y Estados Unidos.

Durante seis años formó parte del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y fue investigador independiente del CONICET, organismo que conducirá desde el 10 de diciembre.

Decidido a dedicar su carrera a la reproducción asistida, en 2002 formó parte del equipo que alumbró a Pampita, la primera vaca clonada de Latinoamérica. Ocho años después nació Ñandubay Bicentenario, el primer caballo. Más tarde copiaría cabras, perros, gatos, cebras y chitas.

Su incipiente desarrollo son cinco cerdos editados genéticamente para que sus descendientes se multipliquen de a miles, y así puedan trasplantar piel, córneas o nervios a humanos.

Para Salamone, la clonación augura un futuro próspero, donde se revierta la diabetes con una sola intervención o se preserven para siempre especies en peligro de extinción.

En cuanto al CONICET, el "clonador" negó ideas de cierre o privatización, pero aseguró que reducirá los ingresos de investigadores. "Cuando uno quiere hacer un proyecto de investigación, tiene que 'venderlo' para conseguir el dinero", justificó, abriendo la posibilidad de que los científicos financien sus propios trabajos.

Su objetivo, además, es reforzar las investigaciones dedicadas a la vivienda, el agro y el clima. "Estamos poniendo plata en lugares que no corresponden, cuando hay gente que no está comiendo", expuso. Cabe resaltar que, en Argentina, la financiación del ámbito de la Ciencia y la Tecnología solo representa alrededor del 0,30% del Producto Bruto Interno (PBI).

En esta nota: Conicet, Milei