Hemoderivados trabaja en un fármaco para combatir la COVID-19: ¿de qué se trata?

El Laboratorio de Hemoderivados de la UNC ya está trabajando en el desarrollo de un fármaco inyectable con anticuerpos contra el SARS-CoV-2, el virus que provoca la enfermedad denominada como Covid-19.

La Universidad Nacional de Córdoba (UNC) y el Gobierno de Córdoba firmaron un convenio para trabajar juntos frente a la pandemia de la COVID-19. Lo que se busca es producir un derivado de la sangre de pacientes que se han recuperado de la enfermedad y que se utilizará en tratamientos de personas convalecientes.

En este marco, el Laboratorio de Hemoderivados de la UNC ya está trabajando en el desarrollo de un fármaco inyectable con anticuerpos contra el SARS-CoV-2, que es el virus que causa la enfermedad COVID-19.

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Según se informó desde la casa de estudios, se trata de una inmunoglobulina enriquecida con anticuerpos específicos para este virus (para el que se necesita plasma de pacientes ya recuperados) con el objetivo de tratar a aquellas personas que estén en etapa crítica de la enfermedad.

Sergio Oviedo, director de Responsabilidad Social y Comunicación de la institución, aclaró que no es lo mismo que aplicar plasma.

“El plasma es un tratamiento de principios del siglo 20. En aquel tiempo no había forma de purificar los componentes. Con el plasma el paciente también recibe otras proteínas y componentes. Es una desventaja de seguridad biológica”, explicó.

Los pacientes recuperados poseen anticuerpos específicos que detuvieron el virus en el organismo. Como esos componentes persisten en la sangre, luego de la recuperación, se pueden aprovechar y eso es lo que se buscará con los procedimientos ya puestos en marcha en Córdoba.

Oviedo estima que el medicamento biológico podría estar disponible en tres meses, aunque insistió en que esos tiempos pueden variar según la logística para conseguir la materia prima: el plasma de convalecientes.

El mayor desafío, que para ello es imprescindible el convenio con el sector público provincial, es generar la logística para conseguir el plasma, tarea que será realizada por el Ministerio de Salud.

Además, cuenta con el apoyo de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) y los institutos de la Administración Nacional de Laboratorios e Institutos de Salud (Anlis).

Hemoderivados tiene varios años de experiencia en el desarrollo de gammaglobulina. Incluso fabrican una con anticuerpos para la hepatitis B. Son la única planta de hemoderivados de América del Sur.

Sobre los resultados preliminares de estos estudios, se remarcó, existe una gran atención científica internacional, ya que infundir inmunoglobulinas ha demostrado en otras infecciones virales ser un método seguro y eficaz, como ha sido probado en múltiples estudios. De todas maneras, lo que está en estudio es en qué proporción será efectiva para tratar el Covid-19.

Con el Instituto de Virología José María Vanella se trabajará en la detección de anticuerpos neutralizantes contra el COVID 19, requisito fundamental para el tratamiento con plasma en pacientes afectados. De igual manera se realizará la detección y el estudio del genoma del virus SARS-Cov-2, comunicaron.

Los especialistas advierten que lo que está en estudio no es una vacuna sino que, aunque será inyectable, se trata de un tratamiento paliativo de los efectos que el virus genera en pacientes que llegan a estados críticos de la enfermedad.