Plena pandemia. Virtualidad. Aparatos tecnológicos. Muchas personas quedaron fuera. En este marco, nació un grupo movilizado por el acceso desigual a las computadoras y la intención de hacer circular conocimiento. Hablamos con Cristian y Daniela, de Cybercirujas.
Vivimos en un mundo atravesado por la tecnología, pero el acceso a la misma es desigual. El derecho a la información y el impulso por democratizar estos recursos, atraviesan al colectivo de Cybercirujas.
Este colectivo promueve una reflexión activa sobre el uso y la vida que le damos a los objetos electrónicos. En ese sentido, recuperan aparatos tecnológicos considerados obsoletos para prolongar su vida útil.
Ahora bien… ¿Dónde los podés encontrar en la Ciudad de Córdoba? Al lado de la Feria Aroecológica, en un espacio clave entre el Data Center de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) y los puestos de frutas y verduras. ¿Cuándo? Los últimos sábados de cada mes, desde las 09:00 a las 13:30 aproximadamente.
Dato: ¿Sabías que hay grupos de cybercirujas en Rosario, Caba, La Plata, Misiones y se está armando uno en Montevideo?
La visión de Cybercirujas
«El objetivo principal del proyecto es compartir conocimientos y una actitud hacia la computación desde lo ciudadano que implique extender la utilización, vida útil de las computadoras, en el amplio sentido, desde consolas de video juegos a celulares, impresoras, compus de escritorio, para contribuir a la idea de que no podemos seguir comportándonos como si los recursos fueran infinitos», explicó Cristian Rojo a El Resaltador.
Desde Cybercirujas proponen la obsolescencia postergada en contraposición de la obsolescencia programada que existe en computadores y software.
«La mayor contaminación se genera desde el momento de la producción de los mismos, por lo tanto, prolongar su uso es ir en contra de esta obsolescencia. Recirculamos, reparamos, reutilizamos. Compartimos conocimientos y animamos también a los/as usuarios/as a la autorreparación de sus equipos», enfatizó Daniela Bosch, de Cybercirujas.
Rojo comentó algo clave: este espacio convoca a toda persona, sepa o no de computación. Se juntan una vez al mes para llevar y recibir todo tipo de hardware, es una forma de hacer recircular aparatos, aquello que quizá en tu casa juntaba polvo o no usabas, es tomado por otra persona para usarlo, postergando la obsolescencia de las computadoras.
Bosch agregó que a las jornadas que se hacen en la UNC se puede llevar cualquier componente informático que ya no se use, ya sea en buen estado o con fallas: ¿Cambiaste la memoria RAM de 4GB de tu PC por dos de 8GB? Podés llevar esa memoria que te sobra, siempre va a haber algún/a Cyberciruja que le pueda dar un segundo uso o potenciar su máquina.
¿Estás a punto de tirar la impresora porque está rota o porque los cartuchos son demasiado caros de comprar? Llevala, aunque el componente o aparato se encuentre roto, en algunos casos pueden reutilizarse sus partes. Por ejemplo, se suelen rescatar los motores de las impresoras para proyectos personales.
Es decir, podés llevar monitores, discos rígidos, lectoras de CD, cables, parlantes, teclados, cargadores, celulares, etc. A este intercambio o trabajo sobre hardware, Daniela le agrega la instancia de recibir consejos sobre cómo podés potenciar tu pc o notebook. Si llevás un pendrive te comparten libros digitales.
Armar dispositivos para combatir la brecha tecnológica
Otra de las acciones que realizan es la entrega de computadoras para personas que las necesiten. En varios casos, quienes participan en Cybercirujas van armando equipos nuevos a partir de recoger piezas distintas o poniendo sistemas operativos más aptos, teniendo siempre como aliado al software libre, esto permite que personas reciban computadoras sin costo.
Si bien, a nivel estadístico es un número «chico»-decenas por años- es el primer paso para democratizar el acceso a las tecnologías desde la ciudadanía:
«A través de ese gesto queremos decir que podemos ser más solidarios en tema tecnológico, que no dependamos sólo de la empresa que nos vende el producto (…) no es algo con lo que logremos cubrir una demanda significativa pero más fuerte que la entrega de una computadora a alguien que la necesite, es que quede instalada la idea de que lo podemos hacer desde la ciudadanía, es un acto político«, dijo Rojo.
¿Cuál es la importancia de que mujeres y diversidades copen este tipo de espacios?
Daniela fue concisa: desde chicas a la gran mayoría les han dicho frases como «Dejá que lo repare tu primo», «Llevalo al vecino que lo arregle», «No toques nada que se va a romper». Para ella, esta visión era la norma social, realizar actividades de reparación estaba mayormente relacionada a hombres cis, que aunque muchas veces podían no saber se animaban más a meter mano y aprendían haciendo.
«Eso está cambiando, gracias a estos espacios como Cybercirujas, cada vez somos más mujeres y diversidades las/os que nos animamos a reparar, nos incentivan, nos motivan y nos tratan de iguales. Creo que hoy en un mundo cada vez más tecnológico, tenemos la obligación de involucrarnos, la tecnología es poder», concluyó Bosch.
¿Querés saber más de este colectivo? Te dejamos los siguientes links:
Canal de video: cybercirujas.
Foro: CyberCirujas. Achicando la brecha digital recuperando hardware ocioso.