En diques y ríos, los privados extienden ilegalmente sus lotes hacia playas públicas. El mayor conflicto es con un gran desarrollo inmobiliario del grupo GNI. La municipalidad de la localidad presentó un plan para recuperar las costas sin hablar del megaproyecto inmobiliario.

Por Anouk Rubini.
Vecinos de Villa del Dique en el Valle de Calamuchita luchan contra la apropiación ilegal de costas de diques y ríos, especialmente la llevada adelante por el grupo desarrollista inmobiliario GNI S.A.
Recientemente, la Municipalidad de Villa del Dique en el Valle de Calamuchita, encabezada por el intendente Emiliano Torres, presentó un plan para recuperar costas del lago de Embalse apropiadas ilegalmente por dueños de terrenos que extienden sus lotes ocupando playas públicas.
No obstante, los vecinos organizados señalan que la Municipalidad arremete contra particulares pero hace la vista gorda al problema mayor: la construcción ilegal de viviendas de lujo frente al dique por parte de la empresa GNI S.A, que implicó destrucción de monte nativo en zona roja, la apropiación de un camino público y de costas del lago.
Vecinos organizados contra la apropiación ilegal y el delito ambiental
Vecinos y vecinas del Valle de Calamuchita vienen organizándose hace años por recuperar las playas públicas y zonas de monte nativo, en especial la zona del Cerro de la Cruz, donde la desarrolladora inmobiliaria GNI construyó casas de lujo ilegalmente.
El Resaltador habló con Gabriel Marco, vecino y miembro de la Asamblea Ambiental de Villa del Dique, articulada con las demás Asambleas Ambientales de Paravachasca y de la provincia de Córdoba.
Marco expresó que hubo dos noticias diferentes pero relacionadas entre sí, una sobre el ordenamiento territorial y la otra vinculada a la iniciativa municipal de despejar las costas públicas.
«Para nosotros son dos notas de propaganda. Una de Pablo Riveros, que es funcionario de Llaryora, y está impulsando los ordenamientos territoriales en la Provincia; y la otra del intendente de Villa del Dique».
Según Marco, el calificativo propagandístico se debe a que el derribamiento de quinchos y otros obstáculos de privados «se hacía periódicamente, bajo diversas gestiones» y a que ambas notas «están omitiendo y consolidando el robo de GNI».
«Nosotros lo que denunciamos es que GNI se apropió del camino público de la Vuelta del Cerro«, que incluso formaba parte de los recorridos turísticos en los folletos de Villa del Dique, señaló Gabriel Marco.
Sobre ese camino, los vecinos denuncian la construcción de las viviendas de lujo «Punta Mansa», que significaron destrucción de monte nativo en zona roja protegida y la apropiación ilegal de esa ruta pública y de la costa del lago.
La doble vara del Municipio
Valeriano Torres, intendente del municipio de Villa del Dique entre 2007 y 2019 y padre del actual intendente Emiliano Torres, fue quien le dio luz verde a GNI para desarrollar sus construcciones en el Cerro de la Cruz.
Los vecinos critican fuertemente que las notas publicadas, omitiendo estos hechos clave y en palabras de Marco, «están avalando y consolidando ese robo» perpetrado por GNI.
«También denunciamos, desde una perspectiva ambiental, que eso es zona roja de bosque nativo (…) hay un delito ambiental que tienen que reparar» y que los patios de las casas de GNI son literalmente el lago mismo, incluso así lo publicita GNI en su sitio web.
Entonces el proyecto del intendente Torres «es un absurdo total: ¿le van a reclamar a los vecinos particulares que no se apropien de la costa, pero cuando lleguen a Punta Mansa no van a hacer nada?», denuncia Marco.
«Nosotros además de que denunciamos que se roba el camino y se usurpan las costas, denunciamos que está construido rebanando todo un cerro que es zona roja, un grave delito ambiental a gran escala y cuyos desechos van al lago», explicitó Marco.
Los vecinos de Villa del Dique están preocupados por las gestiones privatistas de Valeriano y Emiliano Torres, que junto a una coalición con la UCR y el PRO, «están avanzando sobre lo que queda del Cerro de Villa del Dique».
Al respecto, Marco señala que existe un proyecto de ley para que la corona del cerro, zona en la que no se puede construir, se convierta en un parque, pero no solo no se avanzó sino que la urbanización continúa subiendo por la montaña.
«La perspectiva es que se siga avanzando, destruyendo, urbanizando en muchos casos ilegalmente», dijo el vecino.
Marco cerró con un llamado a la acción: «Alertamos y llamamos a todos los vecinos de Villa del Dique de Calamuchita, a las organizaciones ambientales, a denunciar a la Justicia esta apropiación de bienes comunes públicos y además el delito ambiental».
¿De qué se tratan las medidas del municipio?
El proyecto de normalización de la Municipalidad busca recuperar (algunas) playas públicas colindantes al lago, construir una pasarela e instalar luminarias.
El intendente Torres señaló en La Voz del Interior que “el espacio que se invade no es un espacio del municipio o del intendente, es de todo el pueblo, de la gente, y queremos recuperarlo. Cuando sube el lago, así, no tenemos costas”.
Hasta ahora, en la zona colindante a los márgenes del dique de Embalse se identificaron 34 propiedades en falta, que ya fueron debidamente notificadas en enero.
Los vecinos tenían hasta el 7 de marzo para remover cualquier obstáculo emplazado fuera de los límites de su terreno sobre las playas públicas. Las invasiones al espacio público incluyen desde cercamientos hasta quinchos y construcciones de material, de difícil remoción.
Los propietarios que no acaten el pedido recibirán una intimación del Juzgado de Faltas para demolición y retiro de tejido; si la situación persiste, el municipio intervendrá en forma directa.
El intendente señaló que las propiedades hasta ahora identificadas en conflicto están ubicadas en un tramo de costa que va desde la zona ubicada detrás del Club Deportivo local hasta la playa Las Piedras.
Torres expuso a la Voz del Interior que la Municipalidad trabajó en conjunto con APRHI (Administración Provincial de Recursos Hídricos) y que cuenta con el apoyo del Gobierno de la Provincia y la Policía Ambiental.
Más allá de la enardecida defensa mediática de Torres a lo público, persiste el silencio respecto a la invasión más evidente de todas, la de GNI.