Debate Ley de Alquileres: "El problema es que se considera a la vivienda un bien de mercado"
El martes 5 de abril, la Cámara de Diputados inició el tratamiento para modificar la nueva ley de Alquileres, después de que el oficialismo y la oposición acordaran trabajar el tema. Hablamos con Maximiliano Vittar, referente de Inquilinos Córdoba, sobre los posibles cambios y los intereses detrás de los mismos. Ayer, se avanzó para establecer un plan de […]
Por Emilia Urouro | 04/06/2022
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El martes 5 de abril, la Cámara de Diputados inició el tratamiento para modificar la nueva ley de Alquileres, después de que el oficialismo y la oposición acordaran trabajar el tema. Hablamos con Maximiliano Vittar, referente de Inquilinos Córdoba, sobre los posibles cambios y los intereses detrás de los mismos.
Ayer, se avanzó para establecer un plan de trabajo, especificando las fechas en las cuales asistirán los representantes de las partes involucradas (inquilinos, propietarios e inmobiliarias) para plantear, estudiar, analizar, modificaciones en torno a la actual normativa.
Las principales objeciones a la ley tienen que ver con el plazo de duración de los contratos, que pasó de dos a tres años, y con el mecanismo de actualización anual de los precios de acuerdo a una fórmula que combina inflación (IPC) con variación salarial (RIPTE).
A tener en cuenta: Quienes impulsan los cambios, buscan retrotraer las modificaciones anteriores y restaurar los contratos de dos años con indexación semestral.
Hablemos de las posibles modificaciones
En dialogo con EL RESALTADOR, Maximiliano Vittar, referente de Inquilinos Córdoba, dijo que "el plazo mínimo es criticado porque, a mi entender, genera una poca posibilidad del mercado inmobiliario de cobrar más comisión. Hoy en día la comisión está definida en el precio inicial del primer año, eso se multiplica por tres, no pueden valerse de los aumentos escalonados preacordados para aumentar la comisión, como hacían antes".
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En la misma línea, el abogado considera que este plazo genera una mayor estabilidad, y es algo que al mercado inmobiliario no le interesa, les interesa mucho más la rotación, hablando de los grandes desarrollistas, no del pequeño propietario (5 o 4 propiedades).
"Con el tema del índice, desde el mercado inmobiliario quieren seguir definiendo cuánto se paga de alquiler, y de cuánto tiene que ser el aumento, según dos parámetros: la rentabilidad de ellos y la inflación. En ningún momento se habló del bolsillo de quienes alquilan", señaló Vittar.
Para el entrevistado, la discusión que debe darse en el Congreso está en el sentido de esta ley: ¿se busca proteger a un sector que no tiene otra forma de acceder a una vivienda que no sea a través del alquiler o se prima el interés de los desarrollistas y la rentabilidad de grandes propietarios?
Difícil que una ley se cumpla si nadie la regula
Para el referente de Inquilinos Córdoba, quienes acceden a una vivienda a través de su alquiler, necesitan regulación. Considera que el que pide la regulación es el sector más débil, el que pide la presencia del Estado en una relación es el más débil, en comparación del lobby inmobiliario y desarrollista.
Por otra parte, hizo foco en el ideario de las y los inquilinos, en la mayoría de ellos, de que alquilar es una situación que pasa, ya que culturalmente, la sociedad argentina apunta a la vivienda propia. En ese sentido, comentó: "El problema es una concepción histórica, de conciencia de clase de parte de los inquilinos, y una política que se viene reproduciendo de la dictadura para acá, donde se considera que la vivienda es un bien de mercado y no un bien que debe cumplir un fin social. No se busca garantizar el acceso a la vivienda".
¿Qué postura tienen desde Inquilinos Córdoba ante el debate que se aproxima?
Vittar explicó que van a discutir diferentes cuestiones, primero, que no se puede avanzar, seguir discutiendo leyes, si no tenemos un órgano de control que garantice su cumplimiento: "Si nadie desde el Estado controla y garantiza el cumplimiento, difícilmente podamos considerar si funciona o no algo".
Respecto al índice de actualización de precios, sobre si tiene que ser semenstral o anual, consideran que esta última opción se debe ajustar, si lo que se busca es un cambio, bajo el índice salarial del país.
"Si hoy la preocupación de las inmobiliarias es que no saben cuánto van a cobrar de alquiler, les proponemos que el ajuste sea, como lo planteamos en su momento, no siguiendo el RIPTE, sino el salario mínimo, vital y móvil", expresó el entrevistado.
Para Vittar, si se quiere modificar el índice, se debe analizar el plazo del contrato ( Oficialismo e inmobiliarias quieren pasar de 3 a 2 años), qué va a pasar con la vivienda ociosa en Argentina, definir que va a suceder con el precio inicial del alquiler, y debatir sobre el órgano de control de la normativa.
"Una victoria del lobby inmobiliario ha sido tratar de trasladar la responsabilidad del descontrol del mercado inmobiliario a la Ley de Alquileres, porque si este mercado hubiera funcionado bien, si la gente hubiera estado pagando precios bajos, no habríamos discutido cinco años esta normativa", reflexionó el abogado.
El problema no es la ley, es el mercado apostando para que se caiga, sumado a eso, la debilidad del Gobierno Nacional y la situación macroeconómica.
"Si hubiéramos tenido inflación del 40% el año pasado, no estaríamos hoy discutiendo este tema. Actualmente el índice da un 54% de aumento, pero si se hubiese ajustado ese mismo contrato de alquiler, con un ajuste semestral del 20% - como el que proponen ahora- los últimos seis meses segundo año del contrato se pagaría 72% de aumento, contra un 54% alto que hoy plantea la ley", explicó Vittar.
Para el referente de inquilinos, el índice no está mal, la solución no puede ser volver atrás, ni modificar dos artículos, se necesita una discusión de fondo del mercado inmobiliario, dejar de especular con la necesidad de vivienda de la gente.
