Post Argentina-Países Bajos, un hilo responde: ¿De dónde salen las campañas anti- argentinas?
El comunicador Nacho Muruaga, a cargo del newsletter llamado Los Nenes No Lloran, contextualizó las criticas que recibió el seleccionado de Scaloni luego del partido contra Países Bajos, ya que para el periodismo europeísta, las formas de festejar no fueron las "correctas". ¿De dónde salen las campañas anti- argentinas? se preguntó Muruaga, y explicó lo […]
Por El Resaltador | 12/12/2022
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El comunicador Nacho Muruaga, a cargo del newsletter llamado Los Nenes No Lloran, contextualizó las criticas que recibió el seleccionado de Scaloni luego del partido contra Países Bajos, ya que para el periodismo europeísta, las formas de festejar no fueron las "correctas".
¿De dónde salen las campañas anti- argentinas? se preguntó Muruaga, y explicó lo siguiente:
"El germen de todas las campañas anti-argentina: el Libro Azul sobre la Argentina publicado por el Departamento de Estado luego de la segunda guerra. 60 paginas delirantes que buscaban vender la hipótesis de la complicidad argentina con el régimen Nazi".
Elección presidencial del 46. El libro fue parte de la campaña impulsada por Braden en contra de la candidatura de Perón y de lo que el consideraba un gobierno "pro-nazi" que amenazaba la democracia y la paz en la región.
El contenido del libro es bastante pobre. Basicamente una crónica de hechos inconexos mezclados con testimonios de diplomáticos y agentes de inteligencia que abonaban a la teoría de que la neutralidad argentina durante la guerra era una excusa para apoyar a Alemania.
Y aunque pobre, de ahí salieron varios de los mitos que sobreviven hasta el día de hoy sobre Argentina y la segunda guerra: el supuesto colaboracionismo en secreto, las rutas de escape para los jerarcas, etc.
Una operación de propaganda que aunque tuvo relativo éxito a nivel internacional y logró instalar un par de mitos bastante molestos, a nivel local generó el efecto contrario al buscado.
Una anécdota que no muchos conocen. Antes de la campaña, Braden se reunió con Perón y le presentó un "pliego de condiciones" para evitar ruidos durante la elección.
Entre otras cosas, Braden pretendía que se incautarán los capitales y propiedades alemanas y japonesas en el país y se entregarán a capitales estadounidenses.
La anécdota sirve como recordatorio de algo: por abajo de cualquier operación de propaganda moralizante siempre suele haber intereses materiales y geopolíticos. Creer otra cosa es como creer en los reyes magos...
Según contó el mismo Perón tiempo después, Braden le ofreció a cambió de las concesiones hacerlo famoso y popular en el mundo.
Su respuesta, posiblemente exagerada en sus relatos posteriores, es bien pintoresca: 'Prefiero ser el más oscuro y desconocido de los argentinos, porque no quiero llegar a ser popular en ninguna parte por haber sido un hdp en mi país.'
Meses después a la implacable campaña de propaganda desplegada por Braden el incipiente peronismo respondió con una idea bien sencilla que interpretaba de forma perfecta el humor social que lo anti-argentino genera en el país: 'Braden o Perón'.
Hay una pequeña lección: las campañas anti-argentina a nivel local suelen terminar fortaleciendo aquello que buscan combatir. Del librito azul ya nadie se acuerda aunque muchos de sus mitos sobrevivan".
