La CONAE avanza en el desarrollo del lanzador argentino de satélites Tronador II
Junto a la empresa VENG, el centro de actividades espaciales busca lograr "la soberanía en el acceso al espacio con medios propios". Este lunes se llevó a cabo un acto en el Centro Espacial Teófilo Tabanera (CETT) en Córdoba, donde se anunció la firma del contrato entre la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) y […]
Por Cristian Dominguez | 10/04/2022
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Junto a la empresa VENG, el centro de actividades espaciales busca lograr "la soberanía en el acceso al espacio con medios propios".

Este lunes se llevó a cabo un acto en el Centro Espacial Teófilo Tabanera (CETT) en Córdoba, donde se anunció la firma del contrato entre la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) y la empresa VENG para avanzar en el desarrollo del lanzador argentino de satélites Tronador II.
En el encuento particiaron el gobernador provincial, Juan Schiaretti; el presidente de la Nación, Alberto Fernández; el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus; el secretario de Articulación Científico y Tecnológica, Juan Pablo Paz; el director Ejecutivo y Técnico de la CONAE, Raúl Kulichevsky, y el presidente de VENG, Marcos Actis.
El proyecto implica una inversión de 9.730 millones de pesos destinados al desarrollo de un prototipo y de la infraestructura auxiliar prioritaria para la fabricación de este lanzador. Según fuentes oficiales, permitirá lograr "la soberanía en el acceso al espacio con medios propios" y desde Argentina, y podrá colocar en órbita satélites de entre 500 y 750 kilogramos, a una distancia de hasta 600 kilómetros de la Tierra.
Además de incluir a la empresa VENG como principal contratista, el proyecto involucra el trabajo de más de 50 empresas nacionales e instituciones públicas del sistema nacional de ciencia y tecnología argentino.
Para avanzar en el lanzador, de aquí a 2030 se realizarán ensayos con los vehículos denominados TII-70 y TII-150, prototipos que servirán para poner a prueba los motores que llevará a bordo el lanzador Tronador II-250. Se trata de tecnología desarrollada y fabricada en el país, cuyo combustible es oxígeno líquido y kerosene.
Por último, vale destacar que simultáneamente se está trabajando en el desarrollo de la infraestructura asociada, como el banco de ensayos y la plataforma de lanzamiento en el Centro Espacial Manuel Belgrano (CEMB).