Desde la Red Pueblo Alberdi organizan esta iniciativa, junto a la Red de Ollas Populares, para abastecer de alimentos a los merenderos y comedores.
En barrio Alberdi, diversas instituciones están llevando a cabo la campaña solidaria de donación de alimentos para comedores de la zona «De Corazón Sin Igual» 2024.
Es por ello que dispusieron distintos lugares de acopio de alimentos no perecederos, ubicados en la zona de Alberdi y barrios cercanos.
«Esta acción es una iniciativa de la Mesa Solidaria Barrial, un proyecto que estamos impulsando en conjunto para luchar por la seguridad alimentaria de los vecinos y las vecinas de nuestros barrios» manifiestan desde Red Pueblo Alberdi.
De la acción solidaria participan diversos espacios, como la Red de Ollas Populares de Alberdi, el centro vecinal del barrio, el Club Atlético Belgrano, el Instituto de Culturas Aborígenes y otras organizaciones y emprendimientos.
«Tras el corte total de las partidas presupuestarias por parte del estado nacional, entendemos que es nuestra responsabilidad encontrar una respuesta común para acompañar y apoyar a nuestra comunidad ante la situación de crisis económica y social», agregan desde la Red.
Además, anunciaron que habrá puntos de acopio dispuestos en los alrededores del Gigante de Alberdi, en el partido que el Club Atlético Belgrano jugará contra Argentinos Juniors este sábado a las 20:15.
Te puede interesar: “Lo que sé busca, es que las personas en situación de calle vuelvan a tener una pauta de vida”
La situación de los comedores
Conversamos con Mónica y Carolina, dos cocineras y trabajadoras comunitarias que mantienen en funcionamiento merenderos y comedores en Alberdi.
Desde hace 3 años, Mónica abrió el comedor Vecinos Unidos Celeste y el Merendero Corazón Celeste, ubicado en la calle Francisco Muñiz 463, el cual forma parte de la campaña «De Corazón Sin Igual».
Ella nos explicó que desde la Red de Ollas Populares, armaron un cronograma para que todos los días se pueda brindar un plato de comida en el barrio a quien lo necesite. Su comedor abre los días martes.
«En la red se hacen reuniones con diferentes comedores y merenderos, centros vecinales, parroquias, la gente de instituciones como Belgrano, también participan el Colegio Manuel Belgrano y otros. Por el momento, se empezó a hacer esta colecta de alimentos y se repartió hace una semana la mercadería que se habitúa recaudado en 14 comedores. Muchos de ellos no estaban funcionando porque no tenían los medios, y gracias a esta movida volvieron a abrir» explicó Mónica.
El martes pasado repartió 123 porciones de comida y aun así hubo gente que se quedó afuera. «Te da impotencia. Estamos viviendo una situación que no alcanza», expuso con tristeza.
Mónica abrió el comedor por idea de su hija, quien falleció el año pasado, y fue la que impulsó la iniciativa en plena pandemia. Todo se hace a pulmón, nunca recibieron ninguna ayuda del estado. Resaltó que cada vez se suma más gente a buscar su plato de comida.
La cocinera ratificó que es muy importante esta movida para fortalecer los comedores y poder mantener el trabajo que realizan. «Tratemos de ayudar sin pensar quién porque no nos vamos a llevar nada, y lo lindo que queda es lo que diste, eso es un lindo recuerdo» concluyó Mónica.
Por su parte, Carolina, junto a su esposo, mantiene el comedor comunitario Corazones Felices, que también forma parte de la campaña «De Corazón Sin Igual» 2024. Está ubicado en calle Arturo Orgaz 940 y abre sus puertas desde hace 3 años.
El turno de su comedor es los jueves. En las últimas semanas, han brindado un plato de comida a 40 o 50 familias. «Se nos han sumado 20 familias más, son todos vecinos de Alberdi, Villa Páez» indicó.
Corazones Felices tampoco recibió ninguna ayuda del Estado hasta que este año lograron ponerse en contacto con el Ministerio de Desarrollo Social, que les está brindando una parte de los alimentos para cocinar.
Sobre la Red de Ollas Populares y la movida «De Corazón sin igual» Carolina señaló que «nunca me he relacionado mucho con los centros vecinales, pero ahora que tuvimos esa oportunidad, dijimos que si porque está muy difícil llevar adelante una olla popular. Cada semana se van sumando niños, adultos mayores y estamos tratando de que todos los que vengan se vayan con su comida calentita. Nuestra meta es que todos se vayan con su taper lleno» afirmó.
Sumado a ello, señaló que siempre tratan de darle prioridad a las familias, adultos mayores, niños y mamás solas.
