Crisis del papel: las editoriales de libros infantiles reclaman medidas urgentes
El papel ilustración aumentó más de 300% en el último año. Distintas editoriales plantearon que esto "no solo deteriora el ecosistema del libro, sino que además se empobrece la oferta cultural para las infancias". Durante el año 2022, el papel aumentó 150%, porcentaje que superó ampliamente el nivel inflacionario. A su vez, el papel ilustración, […]
Por Agustina Bortolon | 05/22/2023
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El papel ilustración aumentó más de 300% en el último año. Distintas editoriales plantearon que esto "no solo deteriora el ecosistema del libro, sino que además se empobrece la oferta cultural para las infancias".
Durante el año 2022, el papel aumentó 150%, porcentaje que superó ampliamente el nivel inflacionario. A su vez, el papel ilustración, que se utiliza comunmente para tapas, contratapas y libros infantiles, subió su precio en un 300%.
Por tanto, desde hace tiempo la Cámara Argentina del Libro (CAL) viene alertando sobre la gravedad de esta problemática, en un mercado cada vez más empobrecido.
En este marco, recientemente más de 40 editoriales de libros infantiles y juveniles se reunieron para reclamar la regulación "urgente" de la industria y escribieron una carta pública a modo de denuncia.
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En el comunicado, expusieron: "Los precios del papel, la cartulina y el cartón, impuestos por un puñado de empresas que no están teniendo ningún tipo de regulación, son escandalosamente altos, prácticamente los más altos del mundo. Así, los libros que se imprimen en el exterior tienen costos más bajos que los que se imprimen en el país".
Dichas editoriales manifestaron que el contexto de crisis económica a nivel global en el país trae como consecuencia que "las ventas de libros desciendan mes a mes". Además, el dinero que ingresa pierde paulatinamente su valor: "De esta manera, las editoriales no logramos reunir el dinero necesario para imprimir novedades o realizar reimpresiones y vamos 'vaciando' nuestros cuidados catálogos de manera irremediable y, probablemente, irreversible".
Es por esto que resaltan que esta situación crítica requiere medidas urgentes. No solo se deteriora el ecosistema del libro, sino que además se empobrece la oferta cultural para las infancias, con menos variedad de libros, menos prácticas de lectura y menor desarrollo de las funciones cognitivas asociadas.
La carta cuenta con la firma de editores de Iamiqué, Del Naranjo, Limonero, Ojoreja, Pequeño Editor, Comunicarte, Arte a Babor, Riderchail, Amauta, Bambalí, Calibroscopio, Libros del Zorro Rojo, La Marca Editora y Fondo de Cultura Económica.
Algunas consideraciones
Una de las principales problemáticas de la crisis del papel está asociada al oligopolio de Ledesma y Celulosa: dos empresas productoras nacionales que fijan los precios de manera arbitraria. Esto trae aparejado que los editores acepten cualquier valor con tal de producir.
Otro dato fundamental para abordar esta coyuntura es que el papel tiene una participación de más del 50% en el costo general de un libro.
De acuerdo a información brindada por la CAL, "la materia prima cuesta más que el trabajo de autores, editores, diseñadores, imprentas y encuadernadores. Históricamente, esa participación estaba entre el 30% y el 35%".
