Ante la falta de respuesta de la Administración Provincial de Recursos Hídricos al pedido de informe ambiental, desde el Foro Ambiental Traslasierra y Unid@s por el Agua continúan los trámites para que se brinde información sobre la posible situación de expolio que viene sufriendo el Acuífero San Vicente/Los Cerrillos.
Este lunes 22 de julio, el Foro Ambiental Traslasierra y Unid@s por el Agua continuaron los reclamos contra Fondomonte South América S.A., la empresa saudí que está secando un acuífero debido a la extracción sin control.
«Al día de la fecha y luego de vencido largamente el plazo establecido en las leyes de información pública ambiental (10 días hábiles) sin que el APHRI (Administración Provincial de Recursos Hídricos) se haya expedido sobre el pedido de informe ambiental, presentamos los pedidos de PRONTO DESPACHO para que las autoridades competentes den una respuesta a nuestro pedido lo antes posible» informaron mediante redes sociales.
Se trata de un nuevo trámite ante instituciones del gobierno provincial para que se informe la situación del Acuífero subterráneo San Vicente/Los Cerrillos, de donde extrae agua la empresa.
A fines de junio, habían presentado el pedido de informes que no obtuvo respuesta por parte de la APHRI, por lo que reiteran el reclamo.
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La zona donde está ubicado el acuífero y la empresa es un área de riego hídrico, y justamente se encuentran en época de sequía, que perdura hasta octubre o noviembre.
Fondomonte South América S.A. es un emprendimiento de la compañía lechera Almarai, de Arabia Saudita, que en 2011 compró 12 mil hectáreas en la localidad de San Vicente, departamento San Alberto. Siembran alfalfa, cuya producción completa se envía a Medio Oriente para alimentar el ganado que produce la leche.
Estiman que, por año, la empresa extranjera consume 24 mil millones de litros de agua, «el doble de lo que se consume en la zona de Villa Dolores, San Pedro, Villa Sarmiento y demás pueblos cercanos».
Estos centros urbanos consumen agua superficial proveniente del Dique La Viña. Si bien la empresa cuenta con el permiso legal para operar, el extractivismo de Fondomonte está perjudicando de manera irreversible el ecosistema de la región, puesto que, el agua que emplean para regar, no vuelve al sitio.