Córdoba

Con hambre no se puede estudiar: ¿qué pasa con el Comedor Universitario?

Dialogamos con referentes de distintas organizaciones estudiantiles de la Universidad Nacional de Córdoba en torno a los recortes que está sufriendo el comedor universitario, impulsados por la gestión actual. Lina Ávila, dirigente de La Marea (agrupación del MST en el FIT-U) manifestó que "en lo concreto, es un ataque nuevamente al derecho de los estudiantes […]

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Dialogamos con referentes de distintas organizaciones estudiantiles de la Universidad Nacional de Córdoba en torno a los recortes que está sufriendo el comedor universitario, impulsados por la gestión actual.

Lina Ávila, dirigente de La Marea (agrupación del MST en el FIT-U) manifestó que "en lo concreto, es un ataque nuevamente al derecho de los estudiantes a acceder a la alimentación, que es un derecho que además está contemplado dentro de la Resolución de Derechos Estudiantiles aprobado en 2009 por el Consejo Superior".

"Para acceder al comedor universitario, te tenés que anotar presentando la negativa de ANSES, que si tenés un plan social, una beca Progresar, trabajo en blanco vos o alguien de tu familia, va a ser más difícil que puedas acceder".

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Además, agregó que "los últimos datos publicados en el anuario de la UNC dice que se dieron 953 becas Nutrirse, un número muy bajo teniendo en cuenta los 170 mil estudiantes de la Universidad. Sin mencionar que no solo piden tu propia negativa de ANSES sino de toda tu familia".

"Este ajuste es una profundización del ajuste que ya se venía dando. Los últimos datos que publicó la Secretaría de Asuntos Estudiantiles (SAE) son de 2018, donde se anotaban 45 mil estudiantes para solicitar el acceso al comedor. Sin embargo, de esos solo tres mil personas eran las que comían en el comedor. Esto estaba impulsado por las colas eternas, por el difícil acceso al comedor".

"El comedor ya venía sufriendo recortes desde el 2019"

Desde La Bisagra, en conjunto con las demás agrupaciones que componen Estudiantes por la Universidad Pública (EUP), vienen alertando una disminución de quién puede tener acceso al Comedor Universitario.

Mediante un comunicado manifestaron que "el comedor ya venía sufriendo recortes desde el 2019, ya no era tan abierto a todo el mundo, sino que había que reservar las raciones virtualmente en una pagina,. Esas raciones se habilitaban a las 8 de la mañana y a los dos minutos ya no había mas, entonces era muy restrictivo. Ahora lo que hicieron es que solo quienes tengan la beca del comedor van a poder ir a comer ahí".

En ese mismo texto plantean que para tener una beca del comedor tenés que reunir una cierta cantidad de condiciones donde influyen los ingresos familiares. También el promedio influye porque tenes que tener promedio de 4 como mínimo.

En dialogo con EL RESALTADOR, Marcos Schiavi, de la Bisagra, expresó: "los requisitos para acceder a las Becas Nutrirse son de una exigencia elevada, siendo lo más preocupante el pedido de promedio, que oculta una visión meritócrata y contradice el espíritu de la Beca que plantea una buena alimentación para garantizar un mejor rendimiento".

Hagamos una crónica del ajuste:

  • En 2019, el Comedor implementó un nuevo régimen de Becas que segmentaba la participación del comedor entre Docentes y no Docentes, quienes solo tenían acceso a 500 raciones de comida, y entre estudiantes regulares de la universidad y becarios, teniendo acceso a entre 2000 y 2500 raciones.
  • Desde el 2020, con la llegada de la pandemia por Covid-19, el Comedor mantuvo sus puertas cerradas (hasta que volvió a abrir para funcionar como centro de vacunación) entregando módulos alimenticios solo a quienes eran beneficiarios/as de las Becas Nutrirse.
  • En 2022, con la vuelta a la presencialidad este mecanismo de acceso exclusivo a quienes tienen las Becas se mantuvo vulnerando para el estudiantado en general el Derecho al acceso a una alimentación saludable y de calidad.

"Lo descripto hasta aquí da cuenta de un vaciamiento que poco a poco esta siendo llevado adelante por parte del Rectorado de la Universidad" dijo Schiavi.

Para afrontar esta problemática, desde la organización estudiantil plantean una línea es más institucional, de ir presionando en los Consejos Directivos de las facultades y en el Superior para que accionen.

"Desde los distintos órganos de cogobierno universitario de los que formamos parte, impulsamos diversas notas (principalmente en los HCD) para dar cuenta de la problemática y solicitar al Honorable Consejo Superior que se reabran las puertas del Comedor Universitario para toda la comunidad universitaria, que se mejoren las condiciones y se amplíen las raciones y para solicitar un pedido de informe que ponga en conocimiento las condiciones en las que hoy se encuentra el Comedor y sus trabajadores", contó el estudiante.

Esas notas llegaron el día 12 de abril al HCS junto con un pedido de los representantes de la Bisagra, donde se mostró un apoyo generalizado, se avanzó con el pedido de informe y se reactivó la comisión encargada del Comedor para poder mejorar y profundizar la discusión sobre su funcionamiento.

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