Skip to content
Logo El Resaltador

Belén Ameijenda, la primer piloto con discapacidad: su pasión por competir y difundir deportes adaptados

Publicado por:Agustina Bortolon

A los seis años, Ameijenda comenzó a practicar natación de manera competitiva en River. Hoy, con 25, su pasión por las carreras no parece tener un techo, espera conseguir sponsors y una butaca homologada para poder participar el próximo año en la Monomarca Fiat. Su lucha transversal es difundir a los deportes adaptados.

Belén Ameijenda nació con Espina Bífida, e hidrocefalia. Por cómo se vio afectada la zona lumbar de su cuerpo, el primer médico que la vio al salir de neonatología del Hopistal Garraham creyó que debería usar silla de ruedas.

Sobre sus primeros días de vida, a Belén le contaron que la controló «un gran médico en el área de salud, me evaluó delante de mis papás, del frente y del revés, y siempre mis papás me repiten lo mismo: ‘él te entregó a nosotros como si fueses un paquetito, diciéndonos que jamás ibas a poder caminar, sin ninguna alternativa.».

Te puede interesar: «Caso Fly Bondi: «La accesibilidad no debería estar sujeta a las políticas comerciales de una empresa»»

Pero con un intenso trabajo de rehabilitación kinesiológica, proceso que realizó durante once años, logró caminar. Sus primeros pasos los dio al año y medio de vida, con un andador, y hoy usa bastones canadienses de manera autónoma.

«Creo que más allá de lo que haya dicho el médico en una primera instancia, esto de que no iba a poder cambiar, y mi situación actual, tiene que ver no solo conmigo sino con el cuerpo médico que me acompañó y la familia, porque no todos pasan por lo mismo», dijo Belén.

Desde pequeña se apasionó por la práctica deportiva, a los seis años comenzó a practicar natación de manera competitiva en River, hasta los once años, luego se metió en equitación, hizo salto y adiestramiento. Su vida siempre estuvo atravesada por la actividad física, por incursionar en diferentes disciplinas…por eso, está trabajando para dedicarse profesionalmente al automovilismo adaptado.

«El año que viene tengo dos objetivos: empezar a correr en la Monomarca Fiat, y por otro lado, empezar a entrenar un poco de forma más profesional en lo que es tiro con arco, porque si Dios quiere voy a empezar a practicar con la entrenadora de la selección paralímpica de tiro con arco, para ver si puedo llegar a los juegos paralímpicos de París 2024», contó la entrevistada.

Pero para competir en las carreras, necesita una butaca homologada y sponsors…este es su pedido central. Actualmente, está buscando precios de butacas, hablando con empresas. Además, inicio una campaña solidaria para poder juntar el dinero y poder comprar este artefacto.

«La butaca homologada es algo de urgencia que estamos necesitando, porque sin ella nosotros no podemos adaptar el auto mecánicamente para que yo lo pueda manejar. No es un accesorio más, sin esto no lo voy a poder hacer«, enfatizó la piloto.

A pesar de que su participación significaría una importante representación de la Argentina en el automovilismo adaptado, por ahora, el Estado no se ha acercado a la deportista para acordar recursos o incentivos. Para ser específica, se ha contactado con la Agencia Nacional de Discapacidad, y le acercó el caso a Matías Lammens, ministro de Turismo y Deportes de la Nación Argentina, pero no hubo respuestas.

Es la primera piloto mujer con discapacidad del Automovilismo Deportivo en Latinoamérica, pero no cuenta con el apoyo del Estado, por eso, esperamos que visibilizar su historia ayude a que esto cambie.

Para Belén, ocupar ese rol dentro del automovilismo «conlleva una responsabilidad muy grande, no solo en lo personal sino también como deportista, porque más allá de estar hoy cumpliendo mi sueño o a punto de cumplirlo, tengo la responsabilidad y me tomo como tal, el hecho de tener que acercar a las personas con discapacidad a los deportes adaptados«.

La entrevistada destacó que hay un gran abanico de deportes que una persona con discapacidad muchas veces desconoce. Para ella, quienes practican alguna disciplina tienen el objetivo no solo de cumplir sus objetivos personales, sino que el deporte adaptado tenga más valor, y a la vez, que más personas sepan que a raíz del deporte pueden salir de su zona de confort.

«Muchas veces por tener una discapacidad nos hacen creer que no somos capaces de nada, nos hacen creer eso y nos encierran en nuestro propio mundo. Por eso, tenemos que hablar, contar, difundir estos temas», finalizó Ameijenda.

Para contactarte con Belén, te dejamos su cuenta de Instagram: @belu.honda.

Logo El Resaltador

Apoya el periodismo autogestionado

La comunicación la construimos entre todxs.

Suscribite acá