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Argentina: El asesinato del prefecto homosexual Octavio Romero llega a la CIDH

El el año 2011, el prefecto homosexual Octavio Romero fue asesinado. Hubiera sido el primer miembro de las Fuerzas Armadas en casarse con una pareja de su mismo sexo. Él y Gabriel Gersbach, su pareja, iban a oficializar su relación gracias a la Ley de Matrimonio Igualitario. Debido a la impunidad del crimen, el caso […]

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El el año 2011, el prefecto homosexual Octavio Romero fue asesinado. Hubiera sido el primer miembro de las Fuerzas Armadas en casarse con una pareja de su mismo sexo. Él y Gabriel Gersbach, su pareja, iban a oficializar su relación gracias a la Ley de Matrimonio Igualitario. Debido a la impunidad del crimen, el caso llegó a la Comisión Interamericana de Derecho Humanos (CIDH).

Octavio fue encontrado sin vida en la costanera norte del Río de la Plata, jurisdicción de la Prefectura, en Bs.AS. El hallazgo se produjo seis días después de que su pareja denunciara su desaparición. Romero estaba golpeado y desnudo. Según la autopsia fue arrojado sin vida al agua. Días antes había anunciado su compromiso con Gabriel Gersbach.

El caso sigue sin culpables. Ante la falta de respuestas por parte de las autoridades, la pareja de prefecto, junto con la Comunidad Homosexual Argentina, y la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia, se presentaron en el año 2012 como parte peticionaria ante la CIDH. 

La Comisión deberá evaluar si Argentina violó derechos humanos específicos. La comunidad LGBTQ, involucrada en el esclarecimiento del asesinato de Octavio, entiende que la CIDH haya admitido el caso, es un primer paso. Implica comenzar un análisis sobre el accionar del Estado, es decir si se cumplieron los derechos fundamentales, como igualdad ante la ley, integridad personal y protección judicial

La CIDH debe estipular si las violaciones denunciadas, pueden atribuirse al Estado. Es decir que debe comprobar los reclamos de los peticionantes, y dictaminar si el gobierno argentino no actúo conforme a sus obligaciones asumidas.

Una vez realizado el segundo informe por parte de la Comisión, sobre si la autoridad estatal infringió o no los derechos de Octavio Romero y de Gabriel Gersbach, las víctimas podrán elevar el caso a la Corte Interamericana. Este proceso puede tomar años. 

Por Emi Urouro

Emilia Urouro

Encargada de la redacción de las notas y de generar contenido para las diferentes plataformas del Resaltador. Feminista, popular y nacional.
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