Desde la Fundación para la Defensa del Ambiente (FUNAM) informaron que existe riesgo de colapso de la obra por procesos erosivos producto de la sequía, lo que podría desencadenar en una fuerte contaminación.
La Fundación para la Defensa del Ambiente (FUNAM) informó que Susana Rocha y Raúl Montenegro, con el patrocinio legal del abogado Juan Smith, ampliaron su denuncia penal contra el Gobierno de la Provincia «por la ilegalidad con que se está haciendo la colectora cloacal de Sierras Chicas».
El problema principal de la obra es que sigue la costa del arroyo Isquitipe e incluso lo atraviesa, sin tener autorización para hacerlo. El proyecto no podía hacerse en la ribera del río.
Rocha especificó que la colectora «llevaría la totalidad de los líquidos cloacales de Río Ceballos, Unquillo, Mendiolaza, Villa Allende, Saldán y La Calera, localidades que en época de verano e invierno amplían su descarga cloacal por la fuerte afluencia de turismo».
Los denunciantes presentaron ante la Justicia material fotográfico probatorio del riesgo que significa. Las distintas fotos evidencian cómo en estos meses, con el mínimo caudal del río Isquitipe generado por la escasez de lluvia y la sequía general, se observan fuertes procesos erosivos debajo de los caños de conducción de la colectora cloacal.
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Los denunciantes sostuvieron que una rotura del conducto cloacal de Sierras Chicas «no solamente contaminaría el río. No solo podría hacer que fracasen las temporadas turísticas. También amenazaría la salud de las personas que entren en contacto con el agua cargada de contaminantes microbiológicos y químicos».
«Imaginemos al conducto colapsado en verano, descargando continuamente metros y metros cúbicos de líquido cloacal al río. Cuesta creer la torpeza e irresponsabilidad con que se manejó el Gobierno de la Provincia y su área de ambiente».
El Dr. Raúl Montenegro precisó que «este creciente vacío debajo del sistema de conducción amenaza la estabilidad del conducto. Imaginemos lo que sucedería con el río creciendo en forma violenta en verano. Esta violación de las normas, y la torpeza con que actuaron los funcionarios provinciales, no puede pasar desapercibido para la Justicia».
Por su parte, el abogado Juan Smith expuso que la ampliación de la denuncia penal «fue presentada ante lo ostensible de los hechos que están acaeciendo a la vista de todos. No hace falta ser un experto para advertir que esta obra no debió pasar por ahí”.
Las modificaciones que no estaban previstas en la planificación de la obra se realizaron para abaratar costos, violando la ley y cambiando los lugares de construcción del conducto. El proyecto original, aprobado por la Provincia, proponía que la colectora cloacal de Sierras Chicas estuviera fuera del cauce y no constituyera una amenaza para el río.
Los denunciantes concluyeron que se trata de una «irresponsabilidad del Gobierno provincial. No aprendieron nada de la tragedia de febrero de 2015, cuando murieron por la creciente 8 personas, el agua destruyó 250 viviendas, y otras 2.200 debieron ser reparadas. La colectora cloacal pudo hacerse bien y legalmente. Pero optaron por hacerla mal e ilegal. Una verdadera torpeza, serial, y ambientalmente peligrosa».
