Los magistrados rechazaron la apelación del expresidente, condenado en una causa por corrupción y lavado de dinero.
La Justicia brasileña aumentó a 17 años y un mes de prisión la pena contra Luiz Inácio Lula da Silva, expresidente de Brasil (2003-2010), por corrupción y lavado de dinero en el caso un apartamento en Atibaia, Sao Paulo.
Los tres jueces del Tribunal Regional Federal de la Cuarta Región (TRF4) votaron por unanimidad aumentar la pena de 12 años y 11 meses por la que fue condenado en febrero en primera instancia.
A pesar de que el fallo fue emitido en segunda instancia, el exmantario de Brasil seguirá en libertad por la anulación de la jurisprudencia establecida en el año 2016 a partir de la cual se posibilitaba la ejecución de una pena de prisión después de que ésta fuera confirmada en segunda instancia.
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Por ley en Brasil existen cuatro instancias para apelar: Con un juez en la etapa de «instrucción», tres en magistrados en segunda instancia, cinco en el caso del Superior Tribunal de Justicia (tercera) y la Corte Suprema de Justicia que pueden ser cinco u once jueces. En el caso particular de Lula da Silva, todavía le restan dos posibilidades.
Respuesta de Lula
Tras la sentencia del Tribunal Regional, el exmandatario brasileño reafirmó una vez más su inocencia.
«Ganaré cada proceso contra mí desenmascarando sus mentiras. Mi inocencia está probada en el expediente del caso. No tienen pruebas, lo que tienen es una tesis: que Lula no puede ser liberado», tuiteó.
En tanto, su abogado Cristiano Zanin sostuvo que “la decisión es inconsistente con la posición de la Corte Suprema al definir que es necesario darle a la defensa del acusado la oportunidad de hablar después del acusado”.
Por último, insistió en su inocencia y dijo que «Lula no designó directores de Petrobras y no recibió una ventaja indebida».
Por Cristian Dominguez
