El fotoreportero, herido por un gendarme que le disparó un cartucho de gas lacrimogéno a la cabeza, deberá afrontar una nueva intervención quirúrgica.
La salud de Pablo Grillo vuelve a complicarse: deberá volver a terapia intensiva por un cuadro de hidrocefalia, después de estar más de 50 días internado y cuando parecía que finalmente iba a obtener el alta médica.
Grillo fue herido por un cartucho de gas lacrimógeno disparado directo a su cabeza por un gendarme, mientra cubría una de las marchas de los jubilados en el Congreso. El impacto ocasionó fractura de cráneo y pérdida de masa encefálica.
Por la gravedad de sus heridas, Pablo tuvo que ser intervenido quirúrgicamente en múltiples oportunidades, y permanecía internado desde entonces en el Hospital Ramos Mejía.
En los últimos días, su familia había comunicado que la salud de Pablo Grillo mejoraba e iba a ser dado de alta para continuar rehabilitación. Pero luego de una pérdida de líquido cefalorraquídeo por una fosa nasal y con la consiguiente examinación, el equipo médico decidió no solo su vuelta a la sala de terapia intensiva sino proceder con una nueva cirugía para revertir el cuadro hidrocefálico.
Fuerzas, Pablo
Respecto a la salud de Pablo Grillo, sus familiares detallaron que “a raíz de que se controlaron las fístulas por las que perdía líquido cefalorraquídeo, se descubrió un cuadro de hidrocefalia consecuencia del traumatismo». Por ese motivo, “deberá ser intervenido quirúrgicamente a la brevedad”.
Los médicos del Hospital Ramos Mejía estimaban darle el alta el 13 de mayo, después de estar dos meses internado, para luego continuar su rehabilitación en el centro de salud Manuel Rocca.
Esta decisión se debía a la favorable evolución de la salud de Pablo Grillo: había podido caminar sin ayuda y escribir algunas palabras. También pudo salir acompañado y en silla de ruedas a dar un breve paseo por la terraza del hospital, desde donde le sacaron una foto y lo celebraron en las redes.
“Después de 55 días en terapia intensiva, hoy Pablo salió a pasear por el hospital. No fue a hacerse un estudio ni chequeo, salió a disfrutar del aire fresco y recorrer los balcones del hospital. La alegría es total. El agradecimiento es eterno”, habían publicado en la cuenta @JusticiaXGrillo.
Sin embargo, el 12 de mayo el equipo médico le detectó una pérdida de líquido cefalorraquídeo por la nariz. A pesar de haber sido intervenido, el cuadro continuó esta semana. Por este motivo Grillo deberá afrontar una nueva cirugía mayor.
A pesar de la gravedad del hecho represivo por el que Pablo Grillo continúa luchando por su vida, todavía no hay avances importantes en la Justicia para determinar quiénes fueron los responsables.
La familia agradece al apoyo a Pablo e insta a la comunidad toda a «seguir rezando, enviando todo el amor y las energías positivas para que Pablo continúe luchando».
