Córdoba

Nacieron desde un tercer tiempo y hoy son un creciente proyecto de fútbol femenino en Sierras Chicas

Insertas en el Club Atlético Forchieri de Unquillo, desarrollan un trabajo articulado que busca brindar oportunidades en la comunidad. Por Ana Dalmasso Quienes trabajan día a día con el fútbol femenino suelen reconocer el poder revolucionario y de cambio que tiene. Su explosión en los últimos años generó muchos proyectos de trabajo, liderados por mujeres, […]

🕒  5 minutos de lectura

 | 

Insertas en el Club Atlético Forchieri de Unquillo, desarrollan un trabajo articulado que busca brindar oportunidades en la comunidad.

Fotos: gentileza Lucia Montiel

Por Ana Dalmasso

Quienes trabajan día a día con el fútbol femenino suelen reconocer el poder revolucionario y de cambio que tiene. Su explosión en los últimos años generó muchos proyectos de trabajo, liderados por mujeres, quienes buscaron habitar espacios antes negados.

Uno de esos proyectos es Arcoiris Fútbol Club, nacida de un grupo de amigas oriundas de la zona de Sierras Chicas, que buscaban un deporte para practicar y eligieron el fútbol. Así comenzaron a reunirse para jugar, pero lo que se creó ahí adentro fue mucho más poderoso. Su nombre tiene un poderoso significado: “Arcoiris: un equipo con todos los colores”. 

Laura Cortez es psicóloga social y una de las fundadoras de Arcoiris. “Arcoiris empezó en 2016. Éramos un grupo de amigas que queríamos hacer deportes. A los pocos días ya estábamos jugando al fútbol. Luego nos quedábamos al tercer tiempo y ahí se produce la magia. La mayoría somos de Sierras Chicas, vivimos acá y tenemos diferentes profesiones. Trabajamos acá y en esas charlas salió la posibilidad de ver qué le pasaba a las chicas con el acceso al deporte en el lugar. De ahí pensamos más en términos de organización. Nos empezamos a vincular con otras organizaciones de Córdoba y el país, apoyando talleres de fútbol y participando de eventos. Y ahí surgió lo de armar un espacio formativo para las niñas, adolescentes y mayores de la zona”, contó.

Florencia Bracco hoy es entrenadora y quien ayudó a este grupo de amigas a meterse en el mundo del fútbol. De su mano surge la posibilidad, junto con Ayelén Bruno, de llevar adelante esta escuela de fútbol. “Pasa de ser un equipo a una organización. Después teníamos ganas de hacer algo más concreto en Sierras Chicas y así nace la escuelita. Ya veníamos con el espacio recreativo donde dábamos fútbol. Así se formó la escuelita para niñas y luego estaba lo del recreativo en el Polideportivo de Unquillo. Eso pasó en 2019, cuando todavía no estábamos en el club Forchieri”, recordó.

Fotos: gentileza Lucia Montiel

El Club Atlético Forcheri se encuentra en Unquillo y, como entrenaba en el mismo lugar que Arcoris, les ofreció hacerse cargo de la primera del fútbol femenino a Ayelén y Florencia. Fue a inicios de 2020, con una pandemia de por medio que frenó las actividades. “Cuando se abrió todo en octubre ya nos sumamos como escuelita a Forcheri. Fue estratégico fusionar los dos proyectos. Al tiempo sumamos más niñas y armamos dos categorías”, aseguró Florencia.

Sofía Lozada es una de las últimas en sumarse a la estructura, para trabajar ante el aumento en la cantidad de niñas que querían jugar al fútbol. “Yo me sumé a la estructura de juveniles, para seguir aportando a la idea de que las niñas se piensen desde el lugar de habitar una cancha o desde el lugar de futbolista, con proyección. También ir pensando en nutrir a nuestra primera división con las juveniles, y no salir a buscar jugadoras. Actualmente tenemos sub 12, juveniles sub 16, que algunas ya juegan con primera, el plantel superior para la Liga Colón y también el recreativo”, sostuvo.

Pero Arcoiris y Forchieri hoy trabajan en conjunto, buscando cambiar la realidad de su comunidad, involucrándose para buscar soluciones a las necesidades. “Desde el primer momento en el que comenzamos este proceso pensamos el espacio desde el derecho al juego y desde la perspectiva de género. Son las dos patas fuertes que nos constituyen. Y en esto del acceso a jugar, está también la posibilidad de desarrollarse individualmente y llegar a ser una jugadora de fútbol. Es nuestra punta de lanza, la existencia de oportunidades para lo lúdico y lo competitivo”, remarcó Laura.

Fotos: gentileza Lucia Montiel

Florencia, por su parte, destacó el trabajar bajo la órbita de una institución: “Trabajar en un club te brinda otras visiones, como la de articular las inferiores con la primera, cosa que antes con la escuelita no teníamos. Cambia el sentido del trabajo el poder nutrir a la primera. Aumentás los días de entrenamientos, cambias los enfoques y trabajás para la que se suma por primera vez y la que tiene otras aspiraciones”, contó.

Laura rescata, desde su rol de psicóloga, el espacio que fueron creando y los resultados que van obteniendo día a día con las mujeres que se suman. “Estamos paradas sobre el proceso, sobre el trabajo y la apuesta a una mirada integral, de abordaje interdisciplinario del desarrollo del fútbol femenino en Sierras Chicas. Tenemos nuestra propia realidad, diferente a lo que pasa en Córdoba. Las jugadoras son sujetas insertas en la particularidad del territorio. El club es parte de todo esto, somos parte de él y trabajamos hacia adentro. Hay mucho reconocimiento de la comisión y de los profes hacia el femenino, hay diálogo”, aseguró.

Florencia fue un poco más allá y destacó el rol social de un club.”Nosotras estamos participando a una liga del interior, y se nota mucho la importancia del club del pueblo en la comunidad. La familia participa en su totalidad en las actividades y entender eso es estratégico. Si hay algún problema, se puede trabajar de manera articulada”, cerró.

Enterate acá
Enterate acá

Relacionado

Enterate acá

Más de lo último