Abriendo la cancha: “Defendemos el derecho al juego"
El fin de semana pasado se realizó el 35° Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Trans, Travestis, Intersexuales, Bisexuales y No binaries, entre todas las colectivas que había, El Resaltador pudo dialogar con una organización que milita a través del fútbol. Organizadas más allá del deporte Abriendo la cancha es una organización feminista que trabaja y […]
Por Emilia Urouro | 10/13/2022
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El fin de semana pasado se realizó el 35° Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Trans, Travestis, Intersexuales, Bisexuales y No binaries, entre todas las colectivas que había, El Resaltador pudo dialogar con una organización que milita a través del fútbol.
Organizadas más allá del deporte
Abriendo la cancha es una organización feminista que trabaja y activa por los derechos de las mujeres y disidencias a partir de la practica del fútbol.
Su bandera estaba colgada entre dos árboles, en la plaza Independencia, en la capital de San Luis, donde se llevó a cabo el encuentro plurinacional. Había varias organizaciones compartiendo el espacio, se armaban partidos entre las pibas, se invitaba a jugar a quienes estaban mirando.
En este contexto, dialogamos con Ailíñ Correa Perelmuter y Florencia Braccu, parte de Abriendo la Cancha, quienes nos contaron que hace un par de encuentros atrás nació la movida de futbolistas en las plazas, ya que durante mucho tiempo no estuvieron en ninguna grilla del evento.
Los talleres, lugares de debate y reflexión, fueron ganados luego de encontrarse con compañeras de otras provincias, como La Nuestra de Villa 31 de Buenos Aires, y compartir demandas, situaciones y juegos:
“Así fue como se formó también la coordinadora de Fútbol Feminista Sin Fronteras. Venimos sosteniendo ese espacio desde que se inició, después de la pandemia era para nosotras bastante claro que cuando volviera el Encuentro, teníamos que volver”.
La coordinadora surgió después del primer taller de fútbol de mujeres, en el Encuentro de Trelew, como un espacio de articulación de todos los colectivos que se vinculan con el fútbol y al feminismo de distintas maneras: agrupaciones de los clubes, organizaciones como Abriendo la Cancha, que tienen una escuela de fútbol en un barrio, equipos amateurs, juntadas de pibas que se reúnen para entrenar y jugar, hinchadas, jugadoras, profes, medios. Este espacio les ayuda a tener contacto y establecer acciones durante el año.
¿Qué demandas se plasmaron en el Taller que dictaron en este último encuentro?
Las entrevistadas señalaron que se habló de “qué pasa con lo que ocurre dentro de los clubes, con la militancia dentro de los clubes, con ocupar espacios de toma de decisiones, con ocupar espacios en los cuerpos técnicos". Entre otra diversidad de temas, también se trabajó sobre la semiprofesionalización de las jugadoras, una lucha que aún continúa.
Abriendo la Cancha y el derecho al juego
Ailíñ Correa Perelmuter y Florencia Braccu nos contaron que se conocieron jugando al fútbol, pero que no son un equipo, sino que forman parte de una organización: Abriendo la Cancha.
“Trabajamos con un deporte que es colectivo, trabajamos en una escuela para niñas, trabajamos en la cárcel con las pibas que están privadas de su libertad dando talleres de fútbol, trabajamos visibilizando las problemáticas, trabajamos por muchas cuestiones y políticas que tienen que ver con el fútbol y la visibilización de las desigualdades en estos contextos deportivos”, resaltaron.
Para las entrevistadas, desde el fútbol se pueden encarar una diversidad de temas con las infancias y juventudes, por ejemplo, la Educación Sexual Integral y sus derechos.
“El deporte siempre es una herramienta que permite la inclusión; y sin dudas defendemos ‘el derecho al juego’: premisa máxima que nos acerca de forma lúdica, a la defensa de nuestros derechos. Desde ahí pensamos en estrategias específicas, un taller de fútbol en un barrio o en una cárcel”
Abriendo la Cancha se conformó pensando en que querían llevar adelante las escuelitas pero mientras iban trabajando para llevar adelante sus objetivos, se vincularon con gente que ya tenía cierto recorrido de militancia feminista (lpor ejemplo, las compañeras de "La Nuestra") que les fueron transmitiendo mucho conocimiento sobre organizaciones sociales.
“Desde ahí también nace un rescate histórico, pues estamos acá porque antes hubo muchas otras, y es una reparación restituir las historias de las pioneras que nos antecedieron”, concluyeron.
