Resaltadas

Todo fuego es político: el caso de San Antonio de Arredondo

Los incendios en Córdoba no dan tregua y la zona de Punilla es una de las más afectadas. La falta de respuesta y de control municipal es uno de los principales motivos que profundizan la crisis ambiental. Por Leandro Millán Cuando se queman áreas que supuestamente son protegidas en el papel y para la foto […]

🕒  4 minutos de lectura

 | 

Los incendios en Córdoba no dan tregua y la zona de Punilla es una de las más afectadas. La falta de respuesta y de control municipal es uno de los principales motivos que profundizan la crisis ambiental.

Zona arrasada por los incendios en Córdoba.

Por Leandro Millán

Cuando se queman áreas que supuestamente son protegidas en el papel y para la foto (porque en realidad nunca se reglamentan ni se llevan a la práctica las acciones necesarias para que estén protegidas ecológicamente) el fuego llega.

Éste es el caso de la localidad serrana de San Antonio de Arredondo, que desde principio de septiembre del 2021, decretó a través de su Concejo Deliberante como área protegida una zona de Las Jarillas. La cual hace muy poco, sufrió un incendio de aproximadamente 100 hectáreas, ya que todavía no se reglamenta ni hay cartelería informativa en la zona.

Mientras tanto el responsable de Ambiente de la Municipalidad dice que se está evaluando convocar a profesionales de la UNC para planificar cuestiones que exceden al municipio.

La lucha ambiental

Desde Adarsa, amigos del Río San Antonio hace más de 10 años trabajan en varias cuestiones ambientales en el sur del Valle de Punilla. En gran medida, gracias a su trabajo y presión, el Concejo Deliberante de San Antonio decretó esta área protegida.

Sin embargo, Noelia, integrante de la organización, fue muy clara exponiendo que: "la zona no tiene vigías y guardaparques permanentes, no cumple con los requisitos de una área protegida. Por lo tanto, es como un colegio sin maestros o un hospital sin médicos, hasta que no se reglamente no es efectivamente una área protegida".

El objetivo de la reglamentación se dilata por inacción política

Vale la pena aclarar que el área que el Concejo Deliberante decretó como protegida, supuestamente ya está protegida por la Ley de Bosques Provincial. Sin embargo, desde Adarsa explicaron que "de reglamentarse efectivamente, el municipio tendría el poder de instrumentar con guardaparque, cortafuego y demás. Así podrían realizar una política ambiental sobre la zona que según la ley de bosques posee un gran territorio rojo y amarillo. Es decir, intangible donde no se puede tocar y, sin embargo existen loteos y barrios privados, principalmente en la zona amarilla".

Dónde se encuentra la zona amarilla por la Ley de Bosques Provincial existen barrios privados como el Valle de Golf en el camino hacia Las Jarillas, otros semiprivados y algunas viviendas. Como también en las zonas cercanas del piedemonte, dónde es aún más grave y las urbanizaciones lentamente, siguen creciendo sin control municipal.

La versión oficial

El secretario de ambiente municipal, Diego Giménez respondió las inquietudes de El Resaltador y expresó: " Está aprobada la ordenanza, aún no se reglamentó. El área coincide con el área protegida por la ley provincial de bosques".

Al consultarle sobre el trabajo que se está realizando luego de un año de aprobada la ordenanza declaró: "están evaluando convocar profesionales de la UNC para que ayuden con cuestiones que exceden al municipio como la variedad de profesionales para que haya una planificación y análisis integral".

"El área está efectivamente protegida, la voluntad es que esté doblemente protegida, por la provincia y el municipio", agregó. A pesar de estas declaraciones, él mismo aceptó que, por ejemplo, no hay cartelería indicativa en la zona.

La cruel realidad ecológica de las sierras cordobesas

A pesar de la tenacidad e insistencia con que Adarsa pide avances y reclama por la falta de política ambiental, desde la municipalidad de San Antonio no existen respuestas. Ni siquiera habiendo sufrido un incendio de 100 hectáreas en una zona protegida por ley provincial, los funcionarios trabajan para preservar y ordenar las pocas zonas de bosque nativo que aún quedan con vida.

Es importante comunicar que la falta de información desde las cuentas oficiales de la municipalidad es notoria. Hay propietarios de terrenos que quedaron dentro de la zona que incluye la ley de bosques, ya sea en zona roja o amarilla, que no saben qué pasos seguir.

Tampoco están informados, que en la mayoría de los casos no se pueden realizar construcciones y que existe un pago que la provincia debe efectuar, sea para expropiar el terreno o de manera mensual/anual. Lo cierto es que debería hacerse un ordenamiento del territorio a partir de la reglamentación del área protegida que se sigue dilatando todavía.

La falta de políticas ambientales continúa esperando ser real, mientras vemos incendiarse miles de hectáreas de bosque nativo y recursos naturales en las sierras cordobesas.

Luego del último incendio en Las Jarillas, en las redes de Adarsa difundieron un comunicado: "No se quemó, permitieron que se queme; y los responsables tienen nombre y apellido. La imagen es repetida. Donde antes había un manto verde de bosques protegidos, hoy hay una mancha negra".

Faltaba solamente la mano incendiaria que esperara el día y momento adecuados (calor y vientos en la temporada de sequía), para prender ese fuego que alcanzaría a “limpiar” la zona.

ADARSA

Leé el comunicado completo en la siguiente nota: "No se quemó, permitieron que se queme; y los responsables tienen nombre y apellido".

Es urgente que se haga efectiva la gestión, manejo y control de las áreas protegidas y todas aquellas zonas enmarcadas en la Ley de Bosques. Si eso no ocurre, seguiremos lamentando la destrucción del tejido ambiental y social en el que estamos viviendo.

Enterate acá
Enterate acá

Relacionado

Enterate acá

Más de lo último