La empresa del Estado anunció oficialmente el plan para reducir la planta laboral. La medida perjudicará al 23% de los trabajadores.
La Fábrica Argentina de Aviones (FAdeA), ubicada en Córdoba, anunció un plan de reducción de su planta laboral que afectaría al 23% de su personal.
La medida, impulsada por la actual gestión y que forma parte del Procedimiento Preventivo de Crisis (PPC), dejará fuera de la empresa a más de 200 trabajadores y se enmarca en una estrategia de ajuste que ya impacta en diversas áreas del sector público.
La actual gestión asumió en medio de un contexto complejo: fuerte dependencia del Estado (el 90% de la facturación), contratos incumplidos y deudas con proveedores internacionales.
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La decisión de recortar al 23% la planta fue comunicada internamente por autoridades de FAdeA. El plan impulsa retiros voluntarios y jubilaciones anticipadas. En este escenario, los gremios encendieron las alarmas ante el posible avance de despidos encubiertos en una de las pocas industrias estratégicas que aún conserva el Estado nacional.
La medida no es aislada: se suma a una serie de políticas que el Ejecutivo viene aplicando con el argumento de reducir el gasto público. En este caso, el ajuste recae sobre una empresa clave en la defensa y el desarrollo tecnológico del país, históricamente ligada a la soberanía industrial y con fuerte arraigo en la provincia de Córdoba.
La fábrica, que en años anteriores había recuperado actividad con contratos estatales y modernización de su infraestructura, hoy enfrenta la incertidumbre de una reducción que comprometerá su capacidad operativa.
Mientras tanto, los sindicatos de trabajadores ya pidieron audiencias con las autoridades y advierten sobre el impacto social que tendrá esta medida en una ciudad ya golpeada por la recesión. La política industrial vuelve a quedar en el centro del debate.
