Enviaron una nota al Tribunal Superior de Justicia de la Provincia reclamando una resolución que proteja los derechos ciudadanos y el patrimonio ambiental de Córdoba. Denuncian que están construyendo sobre zonas inundables.

Los vecinos autoconvocados de Villa Belgrano continúan con su lucha contra el desarrollo inmobiliario en la zona.
El conflicto está vigente desde hace unos años, tras un crecimiento exponencial de construcción de «housings» y edificios en altura (pese a que está prohibida la construcción de más de dos pisos).
Además, la zona integra a la Reserva San Martín, que es el último gran pulmón verde de la ciudad, afectado por el desarrollismo.
Ante esta situación, en 2023 presentaron un recurso de amparo contra la gestión municipal por permitir el avance de las construcciones. La Cámara Contencioso Administrativa II declaró inadmisible el recurso, pero dio curso a la apelación de los vecinos, por lo cual el TSJ debe decidir sobre el dictado o no de una medida cautelar.
Es en este marco de lucha contra el avance del desarrollo inmobiliario, es que los vecinos decidieron elevar una nota al máximo tribunal provincial para reclamar por “una resolución que proteja los derechos fundamentales de los ciudadanos y el patrimonio ambiental de Córdoba”.
Según publica el medio EnRedacción, la nota dirigida al TSJ afirma que “Villa Belgrano enfrenta una crisis derivada de decisiones que ignoran criterios técnicos y científicos fundamentales, como los contenidos en la Carta de lnundabilidad de la Ciudad de Córdoba, elaborada por la Universidad Nacional de Córdoba en el año 2002 y actualizada en 2015”.
Uno de los puntos claves de la nota es que denuncian que están construyendo en zonas inundables, pese a las advertencias realizadas en el estudio.
“Las recomendaciones científicas han sido desoídas, habilitándose desarrollos de alta densidad que agravan los riesgos de inundación, impermeabilizan el suelo y comprometen tanto a los actuales vecinos como a futuros habitantes de estas zonas” señalan.
Por otra parte, resaltan la advertencia de la bióloga cordobesa Sandra Díaz, quien destaca la importancia de no construir en la costa del río Suquía. Se deben «ampliar las zonas verdes y conservar las márgenes del río como un recurso esencial para mitigar los impactos del cambio climático, mejorar la calidad del aire y preservar su diversidad”.
“Permitir construcciones en zonas inundables y omitir las recomendaciones científicas, vulnera directamente los compromisos internacionales, profundizando la sensación de desprotección y abandono en la ciudadanía”, suman, aludiendo al Acuerdo de Escazú.
Por último, demandan que “la Justicia tiene el deber de velar por la protección de los intereses de la ciudadanía, especialmente en situaciones donde los derechos fundamentales, como el acceso a un ambiente sano, están en riesgo”.