El líder del MAS apuntó contra los agentes del Estado por lo ocurrido y pidió a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que intervenga en la investigación.

Este domingo 27 de octubre, el expresidente de Bolivia, Evo Morales, sufrió un intento de magnicidio. Según denunciaron, «desconocidos» dispararon contra los vehículos en los que se movilizaba el referente del MAS y sus aliados, resultando herido el chofer del auto en el que viajaba Evo.
El actual presidente, Luis Arce, ordenó abrir una investigación sobre lo ocurrido. No obstante, desde el entorno del expresidente responsabilizaron a los agentes del Estado y solicitaron a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que intervenga en el hecho.
El atentado ocurrió cuando Evo Morales se trasladaba desde Villa Tunari a Lauca Ñ, en Cochabamba, para participar en su programa de radio en la emisora Kawsachun Coca.
La Dirección Nacional del Movimiento al Socialismo – Instrumento Político por la Soberanía de los Pueblos denuncia ante la opinión pública nacional e internacional el intento de magnicidio contra Evo Morales Ayma. pic.twitter.com/Y4K70l5i31
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) October 27, 2024
Aunque el chofer de Morales logró desviar su trayecto, las camionetas continuaron persiguiéndolos, hasta que lograron interceptarlos y efectuaron cuatro disparos contra el vehículo, los cuales pincharon una de las llantas forzándolo a cambiar de vehículo.
Tras detenerse, el expresidente abordó un segundo coche que fue impactado por otros 14 proyectiles antes de que la persecución diera su fin, hiriendo al conductor. Los agresores lograron escapar, pero el hecho quedó registrado en un vídeo.
Finalmente, el exmandatario pudo concurrir a su programa radial, en el que explicó que se trató de un intento de magnicidio: «A mí me ha sorprendido. Felizmente hoy día salvamos la vida (…) Esto estaba planificado», afirmó Morales.
En cuanto a la versión oficial, el actual presidente del país vecino ordenó la investigación del ataque, al que calificó de «presunto atentado» contra la vida de Morales.
Sin embargo, algunos dirigentes afines al gobierno de Arce sugirieron que el ataque a Morales podría haberse tratado de un ‘autoatentado’.
Por su parte, la dirección nacional del MAS emitió un comunicado en el que responsabiliza al actual presidente por lo sucedido y a los ministros de Gobierno, Eduardo del Castillo, y de Defensa, Edmundo Novillo.
«Esto es la demostración evidente de que estamos ante un gobierno fascista que no duda en atentar contra la vida del expresidente Evo Morales, de criminalizar la protesta social y de llevar a Bolivia a un enfrentamiento fraticida», expusieron desde el MAS.