La provincia cuenta con 164 mil vacunas. Tendrán prioridad las personas de entre 15 y 59 años consideradas de riesgo y que hayan tenido dengue grave. Se aplicarán dosis en cuatro hospitales de la capital y en centros de salud del interior.

Este lunes 23 de septiembre comenzó en Córdoba la campaña de vacunación contra el dengue. Según el ministro de Salud de la Provincia, Ricardo Pieckenstaine, tendrán prioridad aquellos pacientes de entre 15 y 59 años considerados de riesgo y que hayan tenido dengue grave con más de 24 horas de internación.
El plan de vacunación se implementará de manera escalonada, priorizando la disponibilidad gradual de las vacunas y el nivel de riesgo de los siguientes grupos objetivos:
- Población general entre 15 y 59 años que haya cursado dengue con criterio de internación por más de 24 horas.
- Equipo de salud que haya cursado la enfermedad, hasta 59 años, en sitios priorizados.
- Resto del equipo de salud hasta 59 años.
La notificación de la vacunación se realizará exclusivamente a través del sistema Ciudadano Digital (CiDi). A las personas seleccionadas se les indicará el vacunatorio más cercano a su domicilio y el período durante el cual podrán recibir la dosis.
Los hospitales a los que podrán ser citados en la ciudad de Córdoba son: el Materno Neonatal, el Rawson, el Pediátrico y el Misericordia. En caso de ser del interior, se aplicará en hospitales regionales.
Córdoba compró 150 mil vacunas contra el dengue
A principios de agosto, la provincia oficializó la compra de 150 mil vacunas contra el dengue. Esto equivale a 75 mil esquemas, puesto que la vacuna Qdenga del laboratorio japonés Takeda requiere dos aplicaciones con un intervalo de tres meses entre una y otra. La primera dosis proporciona una inmunidad del 80% y la segunda extiende la inmunidad durante cinco años.
Además, hay que sumar las 14 mil vacunas adicionales que recibirá desde Nacional (siete mil esquemas), que serán utilizadas en el departamento San Justo, marcada como «área priorizada».
La vacuna no evita la picadura ni la infección, solo hace que se desarrollen cuadros más leves. El ministro Pieckenstaine afirmó que es un recurso más en la lucha contra el dengue, pero no la herramienta principal.