Hace un día, el Gobierno Nacional y los bonistas llegaron a acuerdo en la renegociación de la deuda del país. El oficialismo celebró la noticia. Ahora falta trabajar en la misma línea con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Hoy, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, dijo que el eje sobre el cual se renegoció la deuda con los bonistas fue «defender los intereses de los argentinos y no dejar jirones en el camino» y «avanzar en un modelo de desarrollo productivo y empleo».
En declaraciones a la prensa en Casa de Gobierno sostuvo que con los acuerdos que se han logrado están conformes. Además, expresó estar contento con el trabajo que llevó el ministro de Economía, Martín Guzmán.
Siguiendo al punto anterior, Cafiero considera que este arreglo le permite al Estado tener una perspectiva distinta para tomar políticas públicas. Siguiendo esta idea, señaló que «se abandona una especulación financiera e ir hacia un modelo de producción y empleo».
¿Y qué pasa con la deuda que se tiene con el FMI? Acerca de esta negociación, informó que la «idea es que cuando tengamos terminada esta etapa, el 24 de agosto, continuaremos negociando de que forma la Argentina, con estas herramientas, pueda seguir avanzado en esta línea que le está dando muy buenos resultados».
El jefe de gabinete recordó que el «Fondo había planteado que la deuda privada era insostenible, como parte de un análisis técnico que venían haciendo».
En ese sentido, Cafiero es importante que se entienda la modalidad de negociación que puso en práctica Argentina, a través del ministro de Economía y su equipo, y «exhibir las cuentas públicas».
Aún así, señaló que la negociación que se viene por la deuda de 44.000 millones de dólares tomados en la gestión de Mauricio Macri con el FMI «son discusiones muy distintas» a las que se dieron con los acreedores privados.
Para esta etapa ya se confirmó que Guzmán seguirá al frente de las negociaciones.