A dos años del asesinato de Rafael Nahuel, aún no hay culpables

Ayer, hubo distintos actos en Buenos Aires por el jóven mapuche asesinado en 2017. El prefecto que fue imputado en primera instancia por el homicidio, está actualmente en libertad por un fallo de Casación.

Hace dos años, el 25 de noviembre de 2017 en un operativo de desalojo de la comunidad Lafken Winkul Mapu, en Villa Mascardi (Río Negro), Rafael Nahuel fue asesinado de un disparo. El único acusado como autor material de la muerte del joven mapuche es Javier Pintos, un integrante de la Prefectura Nacional, que desde el primer momento recibió el respaldo del Gobierno.

Desde un principio, Prefectura argumentó que durante el desalojo hubo un enfrentamiento armado y que, en medio de una balacera, fue asesinado Rafael Nahuel. Sin embargo, los peritajes determinaron que los mapuches respondieron con piedras y las únicas balas salieron por parte de Prefectura.

En primera instancia, la Cámara Federal de General Roca procesó a Pintos como autor del homicidio, lo que fue revocado por la sala III de la Cámara Nacional de Casación Penal, que devolvió el expediente a primera instancia.

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Es así que la jueza Carina Estefanía acaba de ordenar un tercer peritaje balístico al Ministerio Público de Salta, a pesar de que hubo un impecable análisis que determinó que la bala salió del arma de Pintos, y de los cuestionamientos a los expertos de Salta.

Sucede que fue en el segundo peritaje, a cargo de Gendarmería, que se desestimó la versión que involucraba a Pintos como autor del homicidio.

El tercer peritaje apunta a desempatar esta situación y cumple con lo ordenado por Casación. Pero no sólo será analizada el arma de Pintos sino que también se van a peritar todas las que utilizaron los Albatros.

A pesar de las idas y venidas de la Justicia, quienes recuerdan a Rafael Nahuel tienen muy claro de que el joven mapuche fue asesinado en manos de las fuerzas de seguridad. Ayer, hubo un emotivo acto en Buenos Aires para pedir justicia.

Por Cristian Dominguez